El fiscal superior alerta de un "inquietante" incremento de los homicidios y asesinatos en Castilla-La Mancha
El fiscal superior de Castilla-La Mancha, José Martínez, ha presentado la Memoria de la Fiscalía correspondiente a 2019 en sede parlamentaria, y en cuanto a los datos de criminalidad ha destacado el "importante repunte e incremento de todos los indicadores relacionados con la violencia de género".
En la rueda de prensa previa a su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Generales del Parlamento castellano-manchego, ha puesto como ejemplo la estadística de órdenes de protección a mujeres, que se elevaron de 1.165 en 2018 a un total de 1.600 el pasado año, un 37 % más.
En su opinión, este dato tiene "una doble lectura" que se debe no solo al aumento de casos de violencia machista sino también al "aumento del trabajo judicial y por el afloramiento de casos que en ejercicios anteriores permanecían ocultos".
"Pensamos que se debe a una mayor implicación de las víctimas y confianza en el sistema que les lleva a denunciar los hechos y solicitar medidas", ha apuntado, indicando que se han instalado 136 dispositivos de control telemático.
Más de 50 asesinatos y homicidios en 2019
Martínez ha expuesto los "inquietantes" datos en cuanto al aumento de homicidios y asesinatos registrado en 2019. Así, fueron un total de 53, "cifra que comparada con años precedentes sitúa a 2019 muy por encima de la media aritmética del último quinquenio".
Ha destacado en todo caso la "estabilidad" en cuanto al número de diligencias abiertas en 2019 por delitos como los de lesiones, a lo que ha sumado la "senda de descenso" en los registros de algunas figuras como los delitos contra la libertad sexual, acoso, agresión o delitos contra los menores de 16 años.
Por contra, sí que se contemplan aumentos superiores al 20 en otras figuras como la usurpación, con 800 casos en total en los términos de usurpación de inmuebles o estado civil.
En cuanto a otras modalidades delictivas, descienden los casos de tráfico de drogas, hacienda pública, orden público o atentado a la autoridad; y aumentan delitos de ordenación del territorio, intimidad, inviolabilidad del domicilio o contra las relaciones familiares.
Ha expuesto igualmente el fiscal que hay un ascenso muy significativo del aumento de juicios rápidos durante 2019, más de un 10 %. Una tasa que se supera en todas las provincias, lo que hace que los juicios rápidos se celebren en un número superior a procedimientos abreviados. Esto es "una buena noticia" por la "agilización de la justicia penal", tal y como ha apuntado.
De otro lado, ha explicado que el total de delitos leves se ha ido por encima de los 16.000, lo que supone un 8 % más, un número similar.
En cuanto a los sumarios relacionados a penas de más de 9 años de prisión, Martínez ha concluido que el número total llegó a 87 en 2019, cifra muy superior a los 72 incoados en el año anterior, y mucho más en cuanto a la media de los últimos cinco años, lo que además "contrasta con el descenso a nivel nacional". Ha este dato ha añadido los 15 juicios con jurado popular celebrados en territorio castellano-manchego.
Faltan fiscales
Además, Martínez ha abordado datos sobre la evolución del trabajo en este departamento a lo largo del pasado ejercicio, poniendo el acento en que pese al aumento de 85 a 88 efectivos en el cuerpo --tras aumentar una plaza en Toledo, Guadalajara y Albacete--, la región se queda aún lejos de los cien fiscales que le harían cumplir la ratio media a nivel nacional de 5 por cada 100.000 habitantes.
En rueda de prensa previa a su participación como ponente en la Comisión de Asuntos Generales, Martínez ha destacado que en 2019 se ha completado la implantación de la nueva oficina fiscal como modelo organizativo; añadiendo que ya se ha completado el proceso de reforma en los edificios judiciales de Guadalajara y Albacete, "que entrarán en funcionamiento en lo que queda de 2020".
Ha recordado en este punto cómo en 2006, año en el que estrenó su cargo, asistió a la inauguración de los juzgados de Toledo, tras lo que vinieron nuevas obras en Ciudad Real y Cuenca.
Con estas cuentas, considera que "Castilla-La Mancha ya cuenta con edificios judiciales acordes con la importancia del Poder Judicial, al menos en las capitales". Eso sí, ha advertido que aún quedan actuaciones "importantes" por hacer en las sedes judiciales de Talavera de la Reina y Manzanares.
Martínez ha puesto de manifiesto que a lo largo de 2019 se produjeron importantes avances en la incorporación de nuevas tecnologías al trabajo diario, lo que permitió al sistema estar preparado para afrontar el confinamiento de 2020.
Como otros hitos del trabajo de 2019 ha citado la consolidación de la sala civil y penal del TSCJM como órgano superior en el orden penal, que ya tramita un "importante número de recursos de apelación contra sentencias dictadas por audiencias provinciales".
Martínez ha querido repasar otras dos cuestiones, como son el impulso de la conformidad a la hora de resolver asuntos judiciales. Un extremo que fue "una forma de solucionar conflictos penales no siempre bien entendida pero que es acorde a la realidad de los tiempos.
Esto ha supuesto que en la totalidad de los casos "no se haya producido un colapso de la justicia", toda vez que cuatro de cada diez se resuelven por esta vía, con juicios sin pruebas y dictando sentencia 'in voce', lo cual "permite tomar medidas al momento". Este sistema excluye además ulteriores recursos a órganos superiores.
En Castilla-La Mancha se elaborado una guía práctica para ahondar en este tipo de negociaciones que se realizan entre abogados y fiscales, guía presentada en los seis colegios de abogados, tal y como ha detallado.
El fiscal superior de la región también ha querido exponer el aumento de relaciones institucionales desde el órgano que preside, como las colaboraciones con universidades como la Rey Juan Carlos o el trabajo conjunto con la Consejería de Bienestar Social.