Los ecologistas encienden todas las alarmas por lo que pasará con la carretera de las Lagunas de Ruidera

Ecologistas en Acción (EA) Ciudad Real ha calificado de "despropósito" la discrepancia de criterio que va a existir en la adecuación de la carretera que discurre por el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera y que se prolonga por las provincias de Ciudad Real y Albacete.

En un comunicado de prensa remitido a Efe, esta organización conservacionista ha señalado que el proyecto original que se planteó para remodelar esta carretera se ha cambiado en el tramo de Ciudad Real, que afecta a la carretera CR-650, "por culpa de la Diputación", mientras que el proyecto inicial se mantiene intacto en tramo de Albacete que afecta a la carretera AB-613.

El proyecto inicial, diseñado por la Junta autonómica, consistía en la modificación del diseño de la calzada actual, introduciendo dos carriles bici laterales, identificables mediante el extendido de una capa de lechada bituminosa de color rojo, quedando un único carril central para la circulación de vehículos a motor en los dos sentidos, que se autorregularía mediante cruce o paso alternativo, con invasiones instantáneas en los carriles bici.

Además, en los tramos en los que la carretera cuenta con berma lateral, se iba a acondicionar mediante su afirmado y ensanche puntual para convertirla en una senda peatonal o vía verde, que iba a quedar separada de la calzada de vehículos y bicicletas mediante unos postes de madera tratada y protegida en su borde exterior por una talanquera.

Esta iniciativa, dividida en dos por afectar tanto a Ciudad Real como Albacete, se presentó a la convocatoria para la selección y ejecución de proyectos relativos a la adecuación medioambiental de carreteras muy impactantes ambientalmente del programa FEDER 2014-2020, en concreto en el epígrafe 'Protección y restablecimiento de la biodiversidad y del suelo y fomento de los servicios de los ecosistemas'.

Esta propuesta de cambios en la carretera, cuyo proyecto alcanza el millón de euros, 330.000 euros en la parte ciudadrealeña y 663.000 euros en el tramo albaceteño, motivó protestas de vecinos y empresarios de la zona, que entendían que podría crear graves problemas de seguridad ante la notable afluencia de vehículos en temporada alta.

Sin embargo, la Junta argumentó que ese era uno de los problemas que quedaría resuelto con esta adecuación y con la implantación de limitaciones de acceso al Parque Natural en el periodo estival, han dicho los ecologistas.

Ahora, a punto de iniciarse las obras, EA ha asegurado que ha conocido que el proyecto no se mantiene como inicialmente se había diseñado en la parte de Ciudad Real, "dándose la paradoja de dos adecuaciones y ordenaciones de tráfico distintas dentro de la misma carretera del Parque Natural" que, a su juicio, "agravará los peligros y riesgos de accidentes y supone una estafa a la financiación que otorga la Unión Europea (UE)".

El proyecto en Ciudad Real va a mantener la carretera con su estructura actual, eliminando los dos carriles-bici contemplados en el proyecto original, que si se mantienen en la parte albaceteña, y en ambos tramos si se mantiene la idea de la senda peatonal o vía verde.

Sin entrar a valorar cual de las dos soluciones adoptadas es la correcta, EA ha denunciado lo que considera es "una aberración técnica y un peligro para la seguridad vial no contar con la misma adecuación de la carretera dentro del Parque Natural".

Supuestas presiones devecinos y empresarios

EA ha sospechado que la Diputación de Ciudad Real ha cedido a las presiones de vecinos y empresarios de la zona que no querían el proyecto de adecuación inicial porque, a su juicio, afectaba al funcionamiento actual de los accesos, entradas a viviendas, instalaciones y empresas hosteleras.

Los ecologistas han exigido, por último, que se homogenicen las dos adecuaciones o, de lo contrario, denunciarán el caso ante la UE por un uso arbitrario y fraudulento de los fondos europeos.