Piden inspeccionar un restaurante de Cuenca de la misma cadena que el calcinado en Madrid
Se trata del italiano Burro Canaglia, ubicado en la calle del poeta Diego Jesús Jiménez.
24 abril, 2023 14:37La organización de consumidores Facua ha pedido al Ayuntamiento de Cuenca una inspección "urgente" sobre el restaurante italiano Burro Canaglia con el que cuenta la ciudad, perteneciente a la misma cadena del establecimiento incendiado el pasado viernes en la Plaza de Manuel Becerra de Madrid.
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Según ha informado Facua en nota de prensa, esta solicitud se ha hecho para verificar el material con el que están fabricadas las plantas artificiales de los locales y comprobar si es ignígfugo para así evitar que pueda producirse otra desgracia como la acontecida en la capital del país.
Las causas del incendio se están investigando, pero las llamas se propagaron con rapidez por el techo y las paredes, que precisamente estaban decorados con estas plantas.
El fuego se originó a las 23:00 horas y todo apunta a que se desató después de que las llamas de una pizza flambeada por un camarero prendieran esta decoración. A consecuencia del mismo, dos personas fallecieron y otras 12 resultaron heridas.
Equipamiento distinto al de la licencia
Según ha informado la organización de consumidores, el restaurante de esta cadena ubicado en Madrid tenía un equipamiento distinto al de la licencia de cocina que obtuvo en 1997 la cervecería que se ubicaba en el mismo local.
En este sentido, Facua ha reclamado al Ayuntamiento de Madrid que aclare por qué tenía clasificado al establecimiento en el epígrafe "bar sin cocina" y los motivos por los que no paralizó su actividad cuando constató que era un restaurante en las dos inspecciones alimentarias efectuadas en abril y mayo de 2022.
Asimismo, espera que el Consistorio explique si los responsables del negocio le presentaron la documentación preceptiva para comunicar tanto el cambio de la titularidad como del equipamiento de la cocina y del resto de características de local.
Facua considera que, una vez que las inspecciones alimentarias constataron que el establecimiento desarrollaba una actividad de restaurante y no de bar sin cocina, el Ayuntamiento debería haber aclarado el origen de la incongruencia.