La sobrepoblación de conejos en Castilla-La Mancha, que ha provocado importantes protestas de los agricultores debido al daño que provocan estos animales en sus cultivos, vuelve a generar tensiones entre el sector y la Junta de Comunidades.

En torno a 400 agricultores se han dado cita este viernes a primera hora de la mañana en La Villa de Don Fadrique (Toledo) para impedir que técnicos de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Medio Rural paralizasen los trabajos que una máquina está realizando en una zanja "plagada de madrigueras de conejo, que se cobijaban en los taludes y en el pasto arbustivo y los tarayes que habían nacido en su cauce".

Según ha podido saber EL DIGITAL, los agricultores necesitan un permiso para iniciar estos trabajos y las autoridades castellano-manchegas ya habían avisado de que este viernes se personarían en el lugar para parar la máquina y sanciones a los responsables de su contratación.

Durante la concentración, para evitar que las posibles sanciones recaigan en alguna persona concreta, más de 350 agricultores han firmado un documento en el que declaran ser ellos quienes se han encargado de la limpieza en la zanja y que han dado orden de que la empresa responsable prosiga con sus trabajos aunque Agricultura levante un acta paralizándolos.

Finalmente la jornada ha transcurrido sin incidentes ya que tan solo ha acudido al lugar la Guardia Civil y, en conta de lo que estaba previsto, no se ha personado nadie de la Consejería de Agricultura.

Lo afectados han señalado a EL DIGITAL que "la falta de soluciones por parte de la Consejería ante la plaga de conejos está provocando que los propios agricultores tomen la iniciativa, algo que debería hacer reflexionar al Gobierno regional para tomar cartas en el asunto con carácter urgente, ya que la desesperación de los agricultores puede llevar a la puesta en marcha de graves sanciones que terminarían en una indeseada crispación".