Inicia su actividad otro servicio en el nuevo hospital de Toledo
El Hospital de Día médico del Virgen de la Salud se ha trasladado a las instalaciones del Hospital Universitario de Toledo, donde ha recibido a los primeros pacientes, según informa este martes la Consejería de Sanidad.
El Hospital de Día médico es un área en el que se administran tratamientos o se realizan técnicas diagnósticas o terapéuticas que no pueden hacerse ambulatoriamente en los domicilios o en Atención Primaria, por tanto, es una modalidad asistencial intermedia entre la hospitalización convencional y el tratamiento ambulatorio.
El doctor Ángel Sánchez Castaño, jefe de sección de Medicina Interna, ha explicado que, en esta unidad, donde se atienden a pacientes de diferentes especialidades médicas, como Medicina Interna, Digestivo, Neumología o Neurología fundamentalmente, los pacientes permanecen únicamente unas horas en esta área asistencial.
Su funcionamiento es similar al Hospital de Día Oncohematológico, en el que se administran los tratamientos de quimioterapia a pacientes con cáncer.
El Hospital de Día del Virgen de la Salud comenzó a funcionar en el año 2005 y desde entonces se han tratado pacientes de diferentes especialidades médicas y quirúrgicas, sin embargo, la creciente demanda de este tipo de asistencia en los últimos años ha derivado en falta de espacio, que en algunos momentos pueden haber ocasionado molestias a los pacientes y a los profesionales.
El Hospital de Día polivalente que se pone en marcha hoy en el nuevo Hospital Universitario de Toledo supone una mejora considerable, dado que su construcción y diseño se han hecho teniendo en consideración las necesidades de los pacientes, de sus acompañantes y de los profesionales que desempeña su labor en este servicio.
Esta nueva área asistencial consta de 20 sillones de tratamiento y dos camas, mientras que, en el Hospital Virgen de la Salud, que se encontraba situado en la planta semisótano, disponía de ocho puestos asistenciales, de forma que se ha pasado de 108,61 metros cuadrados a unos 500 metros cuadrados, donde la luminosidad y confortabilidad son la clave para ofrecer un ambiente hospitalario humanizado a los pacientes, ha destacado Sanidad.