Un obispo de Castilla-La Mancha comparece este lunes ante el juez por la demanda de 268 misioneras
El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, y el obispo de Cuenca, José María Yanguas, comparecen este lunes ante el juez por una demanda de 268 misioneras de la Asociación Privada Lumen Dei, de la que Sanz es comisario pontificio, por vulneración del derecho fundamental de asociación.
Lo harán en una vista de medidas cautelares ante el Juzgado de Primera Instancia número 77 de Madrid, que desestimó las declinatorias presentadas por Sanz y Yanguas contra la demanda de las misioneras, para que fuera un tribunal eclesiástico del Vaticano y no la jurisdicción civil española el que resolviera la demanda.
No compete
Sanz y Yanguas consideraban que en virtud del acuerdo entre el Estado y la Santa Sede este asunto no compete a la jurisdicción civil española, sino a los tribunales de la Iglesia Católica, en concreto al Tribunal Eclesiástico de la Signatura Apostólica del Vaticano, al tratarse, según ellos, de una asociación eclesiástica sujeta al Derecho Canónico y no privada como defienden ellas.
Pero el magistrado sostiene que una demanda de protección del derecho fundamental de asociación, recogido en la Carta Magna, interpuesta por un ciudadano español contra una asociación inscrita y domiciliada en España, por hechos acaecidos en nuestro país es competencia de la jurisdicción civil española.
Al ser un procedimiento civil, Sanz y Yanguas no figuran como investigados sino como demandados, por lo que deberán responder a las preguntas que se les formule, algo que ya han adelantado que efectuaran.