El 'Club de los 100 años' no deja de crecer en Castilla-La Mancha: ni la pandemia les ha frenado
Un anciano es una persona de mucha edad, según la definición del Diccionario de la lengua española. Pero "mucha" es un adjetivo indefinido cuyo alcance, si hablamos de longevidad, ha ido evolucionado a lo largo de las últimos tiempos. Si en la década de los 50, casi con toda seguridad, una persona afrontaba su último tramo vital al cumplir los 60 años, ahora la situación es muy distinta: la esperanza de vida en España roza los 84 años y es frecuente mantenerse en plenitud de facultadeshasta los momentos finales de la existencia. Convertirse en anciano, por suerte, requiere acumular más experiencia a las espaldas.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha alertado en varias ocasiones de que las administraciones públicas y la sociedad en su conjunto deben evolucionar "ante el éxito de la vejez", un fenómeno que está poniendo a prueba al sistema de servicios sociales y de protección pública tal y como lo hemos conocido hasta ahora. Por eso, el jefe del Ejecutivo castellano-manchego ya ha planteado una estrategia integral para atender no solo a la Tercera Edad sino a lo que ha denominado como Cuarta Edad.
Y es que los datos hablan por sí solos. En solo dos décadas, el número de personas que superan los 100 años en Castilla-La Mancha casi se ha cuadruplicado. Mientras que en el 2000 eran 205, en 2020 ascendieron a 759, según los últimos datos sobre población publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Cada vez vivimos más y mejor, aunque la pandemia de coronavirus se ha cebado con los mayores a lo lago del último año, tal y como confirman los registros demográficos.
Sin embargo, el 'Club de los 100' no ha dejado de aumentar en Castilla-La Mancha a lo largo de la última década. En 2010 eran 435 castellano-manchegos los que gozaban del privilegio de haber superado la centena y el número ha crecido año a año hasta la actualidad, con un único parón en 2018, donde se registró un casi insignificante descenso en la estadística, pasando de 695 a 690 personas con más de cien años en la región. Incluso, pese a lo devastador de la crisis sanitaria generada por el COVID, se ha registrado un incremento de 56 personas centenarias en 2021 respecto al año anterior (pasando de 723 a 759).
Las mujeres viven más
En Castilla-La Mancha hay censadas 135.194 personas con más de 80 años, de las que el casi 6 de cada 10 son mujeres (82.395 por 52.799 varones). Pero es que ese porcentaje se va incrementando según se avanza por tramos de edad.
Mientras que de los 106.251 castellano-manchegos de entre 80 y 89 años el 60 % son mujeres, en el tramo comprendido entre los 90 y los 94 años -donde se encuentran 22.602 ciudadanos- el guarismo se incrementa al 65 %.
A 1 de enero de 2021 eran 5.582 los vecinos de la región de entre 95 y 99 años, siendo 7 de cada 10 mujeres. Y el porcentaje de hombres se reduce al 25 % cuando se supera el umbral de la centena.
De los 759 ancianos con más de 100 años que había en Castilla-La Mancha a 1 de enero de 2021, tres de cada cuatro eran mujeres. En concreto, las ancianas que superan los 100 años en la comunidad autónoma son 566, por únicamente 193 hombres.