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Corazón LA CANTANTE NETTA SE LLEVÓ EL TRIUNFO

Eurovisión: La "mierda" de Amaia y Alfred en el triunfo de Israel

13 mayo, 2018 08:00

Israel ha ganado el festival de Eurovisión 2018 con 529 puntos después de una disputada final con Chipre y Austria. España se tiene que conformar con el puesto 23 y solo 61 puntos para la actuación de Amaia y Alfred en Lisboa. Israel ha cumplido con los pronósticos y ha conseguido su cuarta victoria con Netta Barzilai. Chipre ha conseguido su mejor resultado de la historia con un segundo puesto gracias a 'Fuego' de Eleni Foureira.

La importancia del sistema de voto, que se reparte al 50% entre el del jurado profesional y el de los eurofans, ha mantenido la emoción hasta el último momento, ya que Israel, Chipre y Austria han tenido opciones de victoria hasta el último suspiro. Cesar Sampson ha quedado en tercer lugar después de llegar a liderar en varios momentos las clasificación. Italia ha sido la gran beneficiada del televoto, que ha colocado a Ermal Meta y Fabrizio en quinto puesto después de ocupar durante gran parte de la votación la parte media de la tabla.

En cuanto a la actuación de España, Amaia y Alfred han estado vocalmente perfectos y han conseguido la magia y conexión que buscaban, haciendo que Altice Arena vibrase con su actuación. Finalmente, España se coloca en el puesto número 23 de 26 con 61 puntos. Sin ningún voto del jurado francés y con dos votos de los portugueses, las cosas tampoco han ido mucho mejor a la hora del televoto como tercer país menos votado de la final.

Tras esta discreta clasificación, la cantante española aseguraba que el puesto le parecía "una mierda, la verdad" aunque reconocía que "nos hemos quedado muy contentos" por su actuación en el festival.

Un espontáneo en la actuación del Gran Bretaña

Otro de los momentos de gala fue cuando un hombre le ha quitado el micrófono a la representante de Reino Unido para decir algo que no se ha llegado a entender.

Justo a continuación, un miembro de seguridad ha subido al escenario para interceptar al intruso, que pretendía reivindicar algo, y de paso devolverle el micrófono a una cariacontecida cantante que aplaudía irónicamente la acción del espontáneo.