Escuelas abiertas bajo el terror yihadista
Militares españoles han inaugurado dos colegios en Mali, donde operan una veintena de grupos yihadistas.
27 noviembre, 2015 02:11Noticias relacionadas
El debate sobre si España debe relevar a las tropas francesas en los diferentes escenarios africanos ha puesto el foco sobre Mali. En este país francófono, inmerso en un conflicto territorial, operan además una veintena de grupos yihadistas. Sobre el terreno, un puñado de efectivos españoles ya lucha por mantener el orden, asesorando a las autoridades locales en materia de Defensa y adiestrando a las tropas. Pero, además, tratan de poner las bases de una paz futura; una paz que, comprenden, debe ir de la mano de la educación. Y para ello han contribuido a levantar dos escuelas y a enviar material para 1.400 niños de entre 6 y 15 años.
“Son habituales proyectos de mejoras y reconstrucciones de escuelas, pero no tan implicados como estos”, reconocen desde el Estado Mayor de la Defensa (EMAD), desde donde se coordinan estos dos proyectos inaugurados en 2015. Los motivos que han empujado a esta implicación están relacionados con las urgencias que ahogan a la población: en un país en el que la mitad de su gente vive bajo el umbral de la pobreza, la educación queda relegada al olvido.
El colegio España, ubicado en el corazón de Bamako -la capital del país-, abrió sus puertas en junio de este año. Un tropel de niños se agolpó a las afueras del centro, pero sólo 1.200 tenían plaza dentro del plan de estudios. Algunos llegaban con sus pupitres en la cabeza, acostumbrados en que en los colegios cercanos no dispongan de ellos. “Se encontraron con esa grata sorpresa”, detallan los militares desplegados en la zona, representados en el acto por el Alfonso García-Vaquero Pradal y acompañados del ministro español en Mali, José María Matres Manso. Para esta escuela, el Ministerio de Defensa ha invertido 112.500 euros y el colegio Fernando de los Ríos, de Ronda (Málaga), ha donado el material. UNESCO Aragón Deporte también destinó fondos para esta causa.
Hace una semana, además, los efectivos inauguraron otra escuela comunitaria; esta vez en Chetou, una aldea diminuta ubicada al norte de Bamako. “La escuela es el único edificio no construido de barro que se encuentra en la zona”, explican desde el EMAD. El coronel José Luis Sánchez Urbón inauguró el centro, acompañado de las autoridades locales y de las familias de los 180 alumnos que acoge el centro. Defensa ha destinado 62.600 euros a este proyecto.
110 militares españoles en Mali
Los 110 efectivos españoles destinados en el país africano forman parte de la misión EUTM-Mali que pretende dotar al Ejército local de las estrategias y medios necesarios para hacer frente a las hostilidades. La zona norte del país, conocida como Azawad, arrastra sus reivindicaciones soberanistas desde hace décadas.
Las estructuras de Estado no llegan en absoluto a esta región desértica, un avispero en el que los tuareg y más de veinte grupos yihadistas luchan por ser la autoridad. Hace menos de una semana, uno de estos grupos, conocido con el nombre de Al Morabitún (Los Centinelas), atacó un hotel de la capital y se llevó por delante la vida de 21 personas.
¿Relevo a las tropas francesas?
Francia aspira a que los países miembro de la Unión refuercen las misiones en las que tiene desplegados a sus efectivos para concentrar sus esfuerzos en Francia. Alemania ha asegurado este miércoles que enviará a 640 unidades a Mali para aliviar el trabajo de los galos, que tienen a 3.000 soldados sobre el terreno. Jean-Yves Le Drian, ministro de Defensa francés, todavía debe reunirse con Pedro Morenés para conversar sobre los escenarios en los que España podría reforzar su presencia.
En las últimas semanas se ha especulado con la posibilidad de que las Fuerzas Armadas asuman la misión desplegada en Mali; una opción que desde Defensa han desmentido en varias ocasiones, todavía con más ímpetu desde los últimos episodios terroristas registrados en Bamako. Entre los círculos militares se asume que España cuenta con la experiencia necesaria para hacer frente al terror yihadista en estos lugares, aunque asumen que para llevar a cabo cualquier operación sobre el terreno hace falta un consenso político que lo apruebe; pero, sobre todo, la presencia de una coalición internacional fuerte como ocurrió en Afganistán.