Cree que su momento llegará a partir del 6 de marzo y confía en que el Rey le permita ir a una sesión de investidura. "Lo normal es que se me permita ir a la investidura". Mariano Rajoy espera ansioso su tiempo en el Palacio de la Moncloa mientras descubre, con "sorpresa", el acuerdo que acaban de firmar PSOE y Ciudadanos para intentar apuntalar a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. "Suprimir las diputaciones, modificar la iniciativa legislativa popular o limitar los mandatos no son los problemas de España. ¿Qué hacemos para crear empleo y para pagar las pensiones?", ha reconocido en una entrevista con Antena 3 en La Moncloa.
A Mariano Rajoy le parece "poco serio" el acuerdo que ayer cerraron Sánchez y Albert Rivera y se muestra muy sorprendido ante el "entusiasmo" del líder de Ciudadanos por apoyar al PSOE. "Es un hecho objetivo, no hago ningún juicio de valor" en que Ciudadanos "ha optado por Pedro Sánchez. Le dio la presidencia de las Cortes a Patxi López y ahora parece que hay que hacer presidente a Sánchez". Sin embargo, este matrimonio de conveniencia no es "ni de investidura ni de Gobierno", a juicio del líder del PP, porque con 130 escaños no se consigue superar una sesión de investidura. "Aunque cada uno con sus votos hace lo que quiere".
El líder del PP confía en que Sánchez no supere la votación de la semana que viene para volver a tender la mano a PSOE y Ciudadanos. "Yo tengo mi programa", insiste Rajoy, "que es la que hice al día siguiente a las elecciones, y me gustaría que Rivera se posicionara sobre él". Los conservadores insisten en la teoría de que ellos ganaron las elecciones y, por tanto, son ellos los que tienen que intentar liderar el nuevo Gobierno. La otra salida es un pacto con Podemos, "pero me parece un poco fuerte. Aunque hemos visto de todo en esta vida".
Mariano Rajoy no tira la toalla. Él cree que es "un activo" para el Partido Popular, por eso se presentará a unas nuevas elecciones si finalmente hay que repetirlas. Además, asegura que ningún gran empresario del Ibex 35 le ha llamado para pedirle la abstención a la votación de Pedro Sánchez. Y advierte: "No creo que a nadie se le ocurra llamarme. Si lo hicieran lo contaría". El líder de los conservadores cree que hay que "tener la conciencia tranquila y no aceptar la presión ni los intereses particulares de nadie. Es muy importante tener equilibrio, intentar ser justo y mirar siempre por el interés general. Voy a intentar acertar, aunque me podré equivocar".
El líder del PP sigue apostando por la prudencia antes de pedirle a Rita Barberá, con la que ha hablado por teléfono, que renuncie a su escaño. "El sumario no se ha abierto, no conocemos cuál es el sumario. Es muy difícil tomar una decisión sobre personas cuando el sumario sigue siendo secreto". En un tono sincero, Mariano Rajoy ha reconocido que Pontevedra le haya nombrado persona 'non grata' ha sido como echarle por encima un jarro de agua fría. "Nunca en Pontevedra se había declarado a nadie persona 'non grata'. Me ha fastidiado".