Los vehículos más contaminantes sufrirán un recargo del 50% en el coste de aparcamiento de las zonas reguladas de Madrid. La medida entrará en vigor en junio de 2017. Al contrario, los que menos perjudican al medio ambiente disfrutarán de una reducción del mismo importe. Esta medida forma parte del conjunto de ordenanzas fiscales en las que trabaja el Gobierno de Manuela Carmena de cara a al pleno de octubre, que se celebrará la semana que viene.
Los coches se clasificarán en relación al baremo diseñado por la Dirección General de Tráfico el pasado abril. La categoría A –los que sufrirán el recargo del 50%– comprende todos los turismos y furgonetas de gasolina matriculadas antes del 2000 y los de diésel inscritos antes de 2006.
La calificación ECO –se beneficiarán de la máxima reducción– engloba los turismos, furgonetas ligeras, vehículos de ocho plazas y de transporte de mercancías calificados como híbridos enchufables con autonomía hasta 40km/h y los no enchufables propulsados por gas natural o licuado de petróleo.
Esta variación impositiva sólo afectará “en positivo” a las tarjetas de residentes pertenecientes a los propietarios de los vehículos menos contaminantes, que obtendrán una rebaja del 50%. El importe requerido a los dueños de turismos categoría A no se incrementará.
"Interés disuasorio"
La delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha relatado que estas medidas se enmarcan en un plan de protección del aire y ha pronosticado “un efecto disuasorio”.
Además, el Ejecutivo de Carmena reducirá de veinte a cinco minutos el tiempo mínimo de aparcamiento en las zonas reguladas, “lo que agilizará el tráfico y desincentivará el estacionamiento en doble fila”.
Aparcar cinco minutos, ha informado Sabanés, costará cinco céntimos en las plazas azules y quince en las verdes.