Por Pedro Sánchez no quedará. Ciudadanos y Podemos se han declarado en múltiples ocasiones incompatibles para una investidura o los grandes pactos, pero el reelegido líder de los socialistas va a llamar "a lo largo de esta semana" a Albert Rivera y Pablo Iglesias para proponerles un "rescate a la gente joven". 

Así lo ha anunciado en el Congreso este martes por la mañana en su discurso ante los diputados, senadores y europarlamentarios del partido. Llegó con su núcleo duro en Ferraz (Adriana Lastra, José Luis Ábalos y Cristina Narbona) y fue recibido con aplausos y algunos diputados en pie. Luego fue saludando uno a uno a la mayoría. Con algunos el abrazo fue efusivo. Con otros, como con los exportavoces Antonio Hernando y Óscar López, que formaron parte de su equipo en el pasado, el contacto fue cortés, pero frío. 

"Nuestro destino es la Moncloa"

En su discurso insistió en que el único enemigo del PSOE es "la derecha", no Podemos o Ciudadanos, a quien volvió a referirse como las "fuerzas del cambio" con las que quiere pactar. "Tenemos un destino, que es la Moncloa", y en ese camino, Sánchez se pregunta "cuántos metros podemos avanzar juntos". 

En ese sentido, Sánchez estableció como "la cuestión" más importante para el país la situación de los jóvenes. "Los jóvenes tienen que ser rescatados" y por eso, la principal y primera medida" que propondrá a Podemos y Ciudadanos será la de un plan para mejorar sus condiciones. 

Para eso, llamará esta semana a los líderes de ambos partidos y se reunirá con ellos. "Imagino que por separado, en el formato que ellos quieran", avanzó, consciente de la dificultad de una reunión a tres. 

En la reunión, previamente, fueron aprobadas por asentimiento las direcciones de los grupos parlamentarios. La del Congreso la encabezará como portavoz la exmagistrada Margarita Robles. En el Senado estará Ander Gil y en el Parlamento Europeo vuelve al puesto Iratxe García.

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