"Dispararon al bulto, se han dado cuenta de que fue un error, pero ahora están yendo hasta las últimas consecuencias", dice un diputado de Podemos afín a Errejón sobre los expedientes abiertos a siete ediles de Manuela Carmena por no donar parte de su sueldo al partido.
La estructura orgánica de la formación morada, controlada por Iglesias, ha colocado en el punto de mira a los concejales madrileños que, al no hacer vida activa en Podemos, sólo cumplen con el código financiero de Ahora Madrid. "Esa cuenta no es nuestra, no tenemos por qué pagar, si quieren, que nos echen", cuenta uno de los señalados a este periódico. "Deben cumplir como cualquier otro inscrito, es su obligación", responde un portavoz de los círculos.
El rejonazo del pablismo a los ediles de Cibeles no ha gustado en el entorno de Errejón, que apunta a la confluencia y al acuerdo como algo imprescindible, "necesario para ganar".
El riesgo de "un ambiente crispado"
El enfrentamiento entre más de un tercio del Ejecutivo de Carmena y la dirección de Podemos llega justo cuando empieza a trabajarse en una candidatura conjunta de cara a 2019. No sólo a nivel municipal. Tal y como adelantó este diario, la marca morada también podría desdibujarse en la Comunidad de Madrid en busca de un modelo transversal como el que aupó a la jueza a la alcaldía.
"No hay por dónde cogerlo. Esto sólo contribuye a que cuando nos sentemos en la mesa, los que no son de Podemos opongan más barreras y se encuentren más lejos", explica un diputado errejonista. "No tiene sentido, pero en la Junta de Gobierno lo tenemos claro, no deben pagar", apostilla otro concejal madrileño afín al exnúmero 2 de Podemos.
La proximidad entre Errejón y los concejales ahora expedientados salió al escenario el pasado 24 de mayo. El ex secretario político de Podemos fue invitado a participar en un acto de Madrid 129, una de las corrientes que engrosa Ahora Madrid y que aúna a tres de los siete señalados. Errejón fue presentado por Celia Mayer, una de las apercibidas, y disertó bajo el título "Populismo, crisis ecológica y cuidados".
A diferencia de los anticapitalistas y los rectores de la organización, tanto el errejonismo como aquellos que forman parte de Ahora Madrid en un ámbito más amplio ven un sinsentido la exigencia del sueldo y el ruido mediático consecuente, que sólo contribuye a crispar unas negociaciones que llegarán más pronto que tarde.
Un par de los ediles señalados, en conversación con este diario, apuntan a un "deseo de control" de Podemos sobre Ahora Madrid, pero zanjan: "Aquí no deben intervenir". La agrupación de las fuerzas de la izquierda, previo paso a la confección de las listas, será mucho más complicada si el expediente a estos concejales se enquista.
El próximo 25 de julio termina el plazo del que disponen los señalados para presentar alegaciones. Han acordado silencio y "pasar a Iglesias la patata caliente" en una suerte de desafío implícito: "Si se atreve, que nos eche".
El veredicto de la Comisión de Garantías
Rebasada esta fecha, la Comisión de Garantías Democráticas de Podemos en la Comunidad de Madrid deberá emitir un veredicto. Es difícil trazar un pronóstico, teniendo en cuenta que no existe un catálogo tipificado de sanciones.
Sin plazo límite, este grupo de trabajo decidirá si estirar la guerra de sueldos entre Podemos y los concejales. Tanto los expedientados como los afines a Errejón coinciden en que "deberían asumir el error y dejar morir al asunto" si no quieren interferir en las próximas negociaciones por la confluencia. "Sería lo lógico, aunque cosas más raras se han visto".