Villarejo afirma que fue "el Estado" el que le envió a sus reuniones con Corinna

El comisario José Villarejo asegura que fue "el Estado" el que le envió a la reunión que mantuvo con Corinna zu Sayn-Wittgenstein, en la que la empresaria alemana habló de las presuntas irregularidades cometidas por Juan Carlos I. El policía también afirma que su gestión aspiraba a arreglar los problemas que surgieron entre Corinna y el Rey emérito, donde supuestamente se manejaría información relevante sobre los movimientos del monarca.

El comisario Villarejo ha declarado en la Audiencia Nacional tras la citación del juez Diego de Egea, después de que EL ESPAÑOL publicase las cintas de Corinna. Las grabaciones recogen una conversación entre la consultora alemana, el excomisario, y el empresario Juan Villalonga. En ellas, Corinna zu Sayn-Wittgenstein asegura que Juan Carlos I la habría utilizado como testaferro para abrir cuentas en el extranjero, y señala las presuntas implicaciones del Rey emérito con irregularidades del caso Nóos o de la construcción del AVE a La Meca, entre otros asuntos.

Fuentes jurídicas afirman que Villarejo ha respondido en estos términos a las preguntas del juez y de su abogado, negándose a contestar a la Fiscalía. El comisario ha hablado de su relación con Corinna y con el también comisario Enrique García Castaño. También ha afirmado que fue "el Estado" el que le envió a sus encuentros con la mediadora alemana.

Las 'cintas de Corinna'

La declaración de Villarejo ha tenido lugar un día después de que el director del Centro Nacional de Inteligencia, el general Félix Sanz Roldán -cuyo nombre se repite con frecuencia en dicha conversación-, diese las explicaciones pertinentes a puerta cerrada en el Congreso de los Diputados. El jefe de los servicios secretos admitió que el CNI tenía una copia de las cintas de Corinna.

Pero esta reunión entre Corinna y Villarejo, que tuvo lugar en Londres en 2015, no es la única que mantuvieron. Fue la primera y después llegaron otros encuentros. El excomisario asegura que las reuniones fueron auspiciadas por el CNI, extremo que el centro niega de forma extraoficial.

El expolicía había solicitado declarar este jueves por videoconferencia alegando un dolor de espalda que ya le impidió acudir a una vista este martes por supuestas calumnias contra el director del CNI. De Egea, no obstante, rechazó su petición y Villarejo ha tenido que acudir in situ a la Audiencia Nacional desde la prisión de Estremera, aunque lo ha hecho a bordo de una ambulancia.

Villarejo lleva nueve meses en prisión preventiva en el marco del caso Tándem, que estudia una presunta trama de corrupción dentro de la Policía.