El discurso viral del coronel Marcos: "La mejor arma para cambiar el mundo es la educación"

"Me llamo Javier Marcos y como veis soy un soldado". Con esas palabras se presentó el coronel Francisco Javier Marcos Izquierdo, director de la Academia de Infanteria de Toledo, en un discurso que ya es viral. En él, y a partir de un combate que libró el Ejército de Tierra en Afganistán, desgrana cuáles son las cualidades que debe tener todo "pequeño gran líder" para transformar la sociedad.

La alocución del coronel Izquierdo tuvo lugar en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), en el marco de un ciclo de conferencias organizado por TEDx. "Lo primero que aprendí cuando ingresé en la academia hace más de 33 años es que uno solo no llega a ningún sitio", arranca el militar, antes de viajar hasta el 7 de marzo de 2012 y narrar el episodio de Afganistán.

Ocurrió en Baghdis. Y con voz firme, el coronel Izquierdo relata cómo una bala alcanzó en el cuello al legionario Iván Castro, cuando patrullaba junto a sus compañeros junto a la ruta Lithium. Su sargento, José Moreno, se jugó la vida para rescatarle bajo el fuego enemigo: "Tu hija va a nacer en dos semanas, tienes que verla". Finalmente, el soldado herido fue trasladado en helicóptero a un hospital de campaña. "Los médicos preguntan quién es la persona que ha atendido al cabo y aseguran que quien lo había hecho le había salvado la vida", relata el coronel Izquierdo.

Con esa actuación, el militar pone de manifiesto los valores que debe tener todo "pequeño gran líder" para influir en su entorno, para ser mejor persona: "Integridad, confianza, ejemplaridad, influencia, humildad". Y sostiene: "El líder actual crece en los corazones".

Cada uno de esos valores lo acompaña de una descripción, de su aplicación en la vida cotidiana. Advierte: "No hay súperhombres ni súpermujeres, hay súpervoluntades". E insiste en que "los valores son lo que hacen grandes a las personas, es lo que os va a convertir en pequeños grandes líderes".

"Creed en vosotros, tened la voluntad de serlo. Mirad, hay quien dice que una de las armas para cambiar el mundo -y os lo digo yo que sé de armamento- es la educación. Estoy de acuerdo, sigo creyendo cambiar el mundo. Y el mejor modo de hacerlo es educando pequeños grandes líderes".