Todavía con el juicio a los líderes del procés en marcha en el Tribunal Supremo y con el exsecretario general de Diplocat, Albert Royo, investigado en el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, el Consejo de la Diplomacia de Cataluña ha retomado la actividad un año y medio después de la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, se ha encargado de anunciar su puesta en marcha con Laura Foraster como nueva secretaria general y una decena de trabajadores que en su mayoría trabajaron en la entidad y fueron despedidos cuando el Gobierno decretó disolver el organismo con la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Aunque su día a día cesó, la Generalitat afirma que "no llegó a liquidarse nunca porque mantuvo su personalidad jurídica".
En el punto de mira del 'procés'
Precisamente la Fiscalía del Tribunal de Cuentas investiga si el Diplocat sirvió para financiar y auspiciar el proceso soberanista y considera que precisamente en su actividad se encuentran los mayores indicios de un presunto delito contra las instituciones del Estado por parte de la Generalitat al no querer aportar sus datos económicos.
Según adelantó EL ESPAÑOL, la Fiscalía del Tribunal de Cuentas ve una "implicación plena del Diplocat en la estrategia de internacionalización del proceso soberanista, con el empleo de cuantiosos recursos en actos sobre el "derecho a decidir", los "procesos de autodeterminación" o "la propuesta catalana para un referéndum". Además del gasto que se habría hecho en los viajes de los denominados "observadores internacionales" durante el referéndum del 1-O.
"No dejaremos de hacer lo que se hacía"
Durante el anuncio de la reactivación del organismo, la nueva secretaria general ha afirmado que "no vamos a dejar de hacer lo que se hacía, sino que se tiene que hacer un plan nuevo que revisarán todos los miembros".
El aparato de propaganda exterior de la Generalitat catalana fue fundado en 2012 por el expresidente Artur Mas y ahora ha cambiado su sede a la Rambla de Barcelona, en un espacio cedido por el Govern.