"Nos sorprendió ayer un poco la intervención de Pablo Iglesias". El Gobierno traslada, de nuevo, que Iglesias es un escollo para que las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez salgan adelante.
Según la vicepresidenta del Gobierno y miembro del equipo negociador, Carmen Calvo, la intervención del líder de Podemos en el Congreso "colocaba [este lunes] en una posición más complicada la propia negociación" al desvelar el contenido de las negociaciones y los ministerios que Sánchez le negó, según el líder morado.
"Nos hemos sentado desde el primer momento que ha sido posible con la mejor voluntad" y "seguimos dispuestos a hablar en la medida en la que las dos partes tengamos la misma disposición", ha dicho Calvo en una comparecencia ante la prensa este martes.
Calvo apela a la prudencia
"Hemos sido prudentes no desvelando nada que pueda entorpecer" la negociación, ha dicho. Y, por ese motivo, Calvo no quiere desvelar la propuesta que, según ella, le hizo el domingo por la noche y que Pablo Echenique, jefe negociador de Podemos, rechazó "20 minutos antes" de que Sánchez comenzara a hablar en el Congreso.
Fuentes de Unidas Podemos aseguran que en la oferta estaban las competencias de Juventud, Vivienda y una vicepresidencia simbólica para Irene Montero sin apenas contenido, pero Calvo no ha querido aclararlo y sólo ha lamentado que Podemos haya rechazado "la propuesta razonable, siempre respetuosa a la otra parte" a la que se refiere. Sí ha admitido que el PSOE no ha vetado a alguien "importante" dentro del liderazgo morado, probablemente refiriéndose a Montero.
"No estemos creando elementos con lo que decimos en público que puedan entorpecer una salida a esto", ha pedido Calvo, que pide negociar con "un empeño más discreto, más prudente".
"En el Gobierno de España, al menos cuando gobernamos los socialistas, no hay elementos menores o decorativos", ha advertido.