El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha iniciado su ronda de reuniones con asociaciones de la "sociedad civil" para explicarle sus intenciones de Gobierno y convencerlos de que lo que necesita España es un gobierno progresista en solitario. Su primer invitado: 20 organizaciones feministas.
Pese a que asegura que "la ronda no es para presionar a Unidas Podemos", aspira a que estas organizaciones ayuden a cambiar de opinión al líder de la formación morada, Pablo Iglesias, para que renuncie al Gobierno de coalición porque, según Sánchez, esta fórmula "ha fracasado".
Eso sí, hay alternativas, según el líder socialista: "El Gobierno de coalición ya fracasó pero hay muchas fórmulas que explorar que se están usando en Europa".
El presidente del Gobierno ha insistido en que "no hay tiempo que perder" y por eso no descarta que sean otros partidos los que faciliten su investidura puesto que lo que está intentando a toda costa es "buscar alternativas que eviten la repetición electoral".
En una breve intervención ante los medios justo antes de entrar en la reunión, Pedro Sánchez ha pedido la abstención de PP y Ciudadanos porque no quiere un Gobierno que dependa de los nacionalistas: "Es un esfuerzo de responsabilidad por su país, generosidad y reconocimiento del resultado electoral para que permita un gobierno progresista".
Cuando terminen todos estos contactos, Sánchez pretende elevar a Unidas Podemos una propuesta programática con todas las peticiones que surjan en sus reuniones.