El lapsus de Alonso: alaba la alternativa que representa "Pedro... perdón, Pablo Casado"

El PP vive momentos de tensión entre su dirección nacional y el partido en Euskadi. Quizás por eso, en el cierre de la convención del PP de Euskadi, su presidente, Alfonso Alonso, perdió el hilo hasta casi acabar alabando a Pedro Sánchez como el líder de un proyecto lleno de "generosidad" y "al servicio de la gente". Ocurrió ante el propio Pablo Casado en Vitoria, ante cientos de afiliados y una gran expectación por las polémicas de los últimos dáis. 

"La gente está pensando que hay una alternativa con capacidad de acuerdo, de generosidad al servicio de la gente, al servicio de los ciudadanos, que es la que representa el PP de Pedro, perdón, de Pablo Casado. Y eso no lo sabíamos nosotros. Y ahora ya no sé si estoy en un acto preelectoral", ha dicho Alonso en su cierre de campaña. 

Casado sonreía y Alonso, al darse cuenta de lo que acababa de decir, también. Pero el presidente nacional del PP recibió muchos elogios de su "amigo" Alonso. "Nuestro objetivo fundamental es que Pablo Casado sea presidente del Gobierno. Para eso estamos aquí", ha dicho. 

La foralidad

Su discurso estuvo plagado de referencias a la foralidad, es decir, el reconocimiento de la singularidad de la comunidad autónoma dentro de España, que históricamente se ha traducido en un tratamiento diferenciado al de otras en materia económica y de autogobierno. 

En otro momento, Alonso habló de cómo ve él la Constitución y lo que significa España. Y la magia volvió a hacer de las suyas. "Una proyección histérica, histórica, eso es España para nosotros", ha dicho en Vitoria ante cientos de afiliados y el propio Casado, muy sonriente en todo momento. 

Alonso no ahorró en indirectas a Cayetana Álvarez de Toledo, la portavoz del PP en el Congreso, de origen argentino, que arremetió contra la estrategia del partido en la comunidad. "Mañana juega el Alavés contra el Sevilla. Quiero que gane el Alavés. A las 14 también es la final del Mundial de baloncesto. Como es España-Argentina, yo quiero que gane España, aunque yo respeto profundamente a los argentinos [ríe] Leeis las cosas que pasan y parece que es una cosa terrible. ¡No es verdad! Somos compañeros, amigos. Ni polémicas ni polémicos. Salís de aquí, se acabó esa broma y trabajamos todos juntos. No somos niños", ha pedido.

"La gente nos tiene que ver también contentos y no enfadados unos con otros. Nunca más. No quiero ninguna discusión más sobre esas cosas", según él. "¡No tenemos tiempo para tonterías!", ha dicho.