Nuevo día, nueva contabilidad. La imagen de la tragedia de la pandemia en nuestro país sigue conformándose cada jornada con un método diferente: ahora se incluyen fallecidos con pruebas PCR, ahora no; ahora añadimos fecha de diagnóstico de cada paciente, ahora no. Y, claro, así, todo baila.
El cambio en el tratamiento de los datos ha derivado en que, durante las últimas veinticuatro horas, Sanidad incluya 283 fallecidos más en el cómputo total, pero sólo 35 de ellos son correspondientes a la última semana. Un galimatías.
Según las últimas cifras, en España ha habido, en total, 27.117 ciudadanos fenecidos por covid-19. Son los oficiales. Teniendo en cuenta los números facilitados el día anterior, han aflorado 283 muertos tras la desaparición de 1908 fallecidos del recuento directo del Ministerio de Sanidad.
Fallecidos en los últimos siete días
Por eso, el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha tenido que explicar que sólo 35 de esos decesos se produjeron en la última semana. La diferencia es por los reajustes del método de conteo. También explica por qué el titular de Sanidad, Salvador Illa, ya habla de “fallecidos en los últimos siete días”.
La modificación tuvo lugar el pasado 11 de mayo, un intento más por parte del Gobierno de armonizar el sistema y conseguir una contabilidad fiable, siempre a través de los datos recolectados a través de las comunidades autónomas. Con el nuevo método, el ministerio pasa de registrar los casos notificados en las últimas 24 horas a dar cuenta de los nuevos diagnósticos en ese mismo tiempo.
Antes se informaba de los casos y fallecimientos de personas a las que se les había diagnosticado covid-19 a través de una prueba PCR -así lo exigía la OMS en su definición de caso-. Y era de manera agregada: los contagios y fallecimientos podían pertenecer a días anteriores a la fecha de notificación, por el tiempo que tardaban los laboratorios en entregar los resultados.
El despliegue, desde ese momento a esta parte, es superior. Se colectan y se procesan más datos por paciente. En cada fallecido consta la fecha en que comenzó a tener síntomas, la de diagnóstico, la de notificación y la de muerte.
Informes con curvas
Pero al no haber tomado esta decisión en el primer momento -y haber dado diferentes pasos en falso, con cada comunidad a su libre albedrío antes de instaurar una contabilidad única, tal y como viene denunciando EL ESPAÑOL desde el inicio de la pandemia-, todo ha de revisarse.
Sanidad parece ser consciente, y por eso alega, en palabras de Simón, que los desajustes en las cifras "seguirán" unos días . "Algunos fallecidos son antiguos, otros se retirarán de la categoría de coronavirus y otros hay que reubicarlos". Se vienen curvas en los informes del coronavirus.
Con todo, hay miles de fallecidos que no están en esas series. El dato de muertes por covid-19 que ofrece el Ministerio de Sanidad se refiere a los decesos de personas que han sido sometidas a una prueba de diagnóstico. Por eso, la fotografía que ofrece es parcial: sólo muestra una parte del total.
¿Cuál es el total real? Son 50.500 muertos en España, en cifras de la empresa experta en big data Inverence, según su último estudio, que publicó este periódico. Siempre, basado en la información proporcionada por los Registros Civiles a través del sistema MoMo, y otras informaciones complementarias, como la suministrada por la Generalitat de Catalunya y por Sanidad.