El Parlament ha validado este martes las conclusiones de la comisión de investigación sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, en las que se tacha la medida adoptada en otoño de 2017 de "golpe de Estado institucional" y se pide la abdicación del rey Felipe VI.
Han votado a favor de la abdicación del rey JxCat, ERC y la CUP, que también han dado luz verde a la reprobación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por su papel de esos días.
La comisión de investigación sobre la aplicación del artículo 155 se activó a finales de 2018 y ha estado marcada por la polémica desde el primer día, pues Ciudadanos, PSC-Units y PPC rehusaron participar en los trabajos porque consideraban que su enfoque era partidista y solo buscaba reforzar las tesis independentistas.
Sí que se pudo ver a los representantes de Cs en la sala durante la declaración del exvicepresidente Oriol Junqueras, que al igual que el resto de exconsellers presos compareció ante la comisión el pasado 28 de enero para dar su punto de vista sobre las repercusiones que tuvo la aplicación del artículo 155 en los departamentos que entonces lideraban.
También comparecieron ante esta comisión banqueros, empresarios y representantes de entidades sociales, y, aunque se les llamó, no acudieron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni algunos miembros del anterior ejecutivo central, como Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría.
En las conclusiones, se afirma que estas ausencias constituyen un "menosprecio" al Parlament y se reprueba gracias a los votos independentistas a Sánchez, a Rajoy y al exlíder de Cs Albert Rivera.
Asimismo, se manifiesta que "la aplicación del artículo 155 fue una acción política perfectamente asimilable a un golpe de estado ejecutado desde los mismos aparatos del Estado" y se constata que "los aparatos del Estado no quieren reconocer su realidad de estado plurinacional y están dispuestos a reprimir por la vía de la fuerza cualquier expresión democrática de las naciones que la componen".
Cifra en 1.800 millones de euros el impacto económico de su aplicación.
En cuanto al rey Felipe VI, se le reprocha una vez más el discurso que pronunció el 3 de octubre de 2017, que los grupos independentistas ven como "un paso imprescindible" para la posterior aplicación del artículo 155, y se pide su abdicación.
"Consideramos necesaria la abdicación de Felipe VI, una investigación exhaustiva sobre las interferencias políticas y la corrupción de la monarquía borbónica y un referéndum sobre monarquía o república en el resto del Estado", dice el punto.
En el debate previo a la validación del dictamen de conclusiones, los grupos independentistas y los comunes han reprochado a Cs, socialistas y populares que no hayan participado en los trabajos de la comisión pese a que en 2017 apoyaron la aplicación del artículo 155 en el Senado.
JxCat y ERC han considerado que el levantamiento del artículo 155 no acabó con la "represión" con el independentismo, motivo por el cual la CUP ha abogado por volver a la unilateralidad.
Cs, socialistas y populares, en cambio, han reivindicado que la intervención constitucional evitó males mayores y sirvió para estabilizar la situación en Cataluña.
Por su parte, los comunes creen que el tiempo ha confirmado que la declaración unilateral de independencia fue un error y la aplicación del 155 no sirvió para encauzar el conflicto, que en su opinión solo se resolverá a través del diálogo.