Dicen los investigadores de la Policía Nacional que en la urbanización Altea Hills, el prohibitivo complejo residencial encaramado en una loma a las afueras de Altea (Alicante), tiene su residencia uno de cada cuatro rusos en España. Muchos compatriotas llegados de fuera con necesidades similares a la hora de resolver determinados trámites burocráticos viven allí. Alguno de ellos, como Alexey Shirokov, parecían poseer sobrada experiencia y contactos para acelerarles a todos las cosas con la mayor rapidez posible.
Un claro ejemplo de estas actitudes se encuentra de nuevo en las comunicaciones intervenidas por los investigadores. En una de ellas, a cuyo contenido ha podido acceder en exclusiva EL ESPAÑOL, el abogado de origen ruso Shirokov llegaba a sugerir a uno de sus colegas que la zona de Alicante era la mejor para acelerar todo tipo de trámites.
En esa conversación, su interlocutor -no está investigado en la causa- le pedía ayuda con unos trámites de extranjería. Tenía mucho interés en acelerar las gestiones. Es entonces cuando le pregunta que dónde cree que es el mejor sitio para realizarlas. El presunto conseguidor de la mafia rusa le recomienda el lugar exacto al que su colega debe ir para agilizar esa gestión: "En Alicante están los muchachos correctos para eso".
Esta revelación se suma a las ya descritas y reflejadas en los últimos días por EL ESPAÑOL. Todas ellas esbozan la dimensión de la telaraña que presuntamente habrían logrado urdir tanto Shirokov como el resto de integrantes de la trama.
Las llamadas telefónicas a los conseguidores y a los presuntos integrantes de la gran trama de la mafia rusa en España desmantelada la semana pasada está revelando la profundidad de los contactos que habían establecido algunos de ellos con funcionarios, políticos y otros miembros de la Administración General del Estado.
Por eso y por muchas otras razones el conseguidor de los rusos no le temblaba la mano cuando tenía que pedir favores por doquier. Algunas otras de las comunicaciones intervenidas y presentes en la causa lo demuestran. En ella se escucha a un asesor y empresario local hablar con Alexey de un niño extranjero que se halla en España pero que acaba de fallecer.
Alexei es el abogado filántropo tras el que dos mafias rusas ocultaban un imperio.
Ambos convienen que es preciso ocultar el fallecimiento del niño. El objetivo es que su madre consiga optar a la residencia en España. Ello constituiría un claro delito a juicio de la magistrada. Se trataría de un claro caso de falsedad documental.
Ladrones en Ley
La investigación iniciada en 2013 comenzó pocodespués de examinar esos movimientos se percataron que los fondos de las gigantescas operaciones bancarias que el clan estaba llevando a cabo no estaban suficientemente justificados. Al mismo tiempo que realizaban estas maniobras, perpetraban otras operaciones comerciales "de dudosa legalidad".
El dinero provenía tanto de políticos y empresarios de la región rusa de Nizhny Novgorod como de algunas personas vinculadas a la criminalidad organizada exsoviética. Algunos de ellos, de la esfera de los 'Ladrones en Ley', el más alto rango de ese mundo criminal, y otros de los sindicatos del crimen rusos.
Estos visitaban regularmente nuestro país, haciéndose pasar por turistas u hombres de negocios. Se dejaban ver por Ibiza, por Málaga, por Alicante. Después de su llegada eran conectados con empresarios españoles de alto nivel por medio de los ciudadanos rusos afincados en España.
Parte del dinero incautado en el operativo contra la mafia rusa.
Los miembros de la trama transportaban en efectivo grandes cantidades de dinero por el territorio nacional desde España al extranjero y viceversa. Para ello se valían de empresas pantalla a nombre de testaferros. También llegaban a mover de manera opaca "sustanciosas" cifras de dinero. Nunca, aparentemente, llamaban la atención de las autoridades.
Prestigiosos empresarios
Los implicados simulaban ser prestigiosos hombres de negocios. Adquirían mansiones, restaurantes, discotecas o invertían en lujosos negocios en territorio nacional. Era ahí, en el contacto con el último escalón, a la hora de encontrar determinados títeres con los que presuntamente lavar el dinero, cuando entraban en acción Alexey Shirokov y sus contactos en la Costa Blanca.
Los agentes de la UDYCO bautizaron el mayor golpe de la década contra la mafia rusa con el nombre de 'Operación Testudo'. Se trata de un tipo de tortuga actualmente en peligro de extinción. También hace referencia a una formación de combate adoptada por las legiones romanas. En ella las disciplinadas filas de legionarios avanzaban lentamente hacia el enemigo pero protegidas en todo momento por sus escudos. Bien adiestrados en ella lograban resistir durante horas.
Los investigadores aguantaron esquivando la posibilidad de que se filtrasen sus indagaciones. Siete años después de empezar, tras proteger su investigación una y otra vez, encontraron el momento adecuado para asestar el golpe.