Ministros de Sánchez piden que la coalición se "revise" tras el 14-F por el acoso repetido de Podemos

"Ya sabes cómo es la nomalidad democrática", subrayaba con media sonrisa el vicepresidente segundo cuando el presentador del espacio radiofónico, Jordi Basté, le revelaba en el transcurso de la charla que el presidente del Gobierno había rechazado concederle una entrevista durante la campaña electoral.

Varios ministros socialistas creen que provocaciones como esa, y en general el acoso repetido por parte de Podemos, hacen necesario que el pacto de coalición se "revise" después de los comicios autonómicos del próximo domingo. Una año después de la investidura, consideran irrespirable el clima de tensión creciente con su socio, que eclipsa además otras cuestiones relevantes.

Sánchez, Calvo e Iglesias, durante una reunión del Consejo de Ministros. EFE

"La ayuda de los fondos europeos parece que ha pasado a un segundo plano", lamentan desde el entorno de uno de esos ministros del PSOE, en referencia al proyecto más importante que tiene entre manos el Ejecutivo, los 140.000 millones aprobados para nuestro país el pasado julio por el Consejo Europeo, para el Plan de Recuperación tras la pandemia.

En aquel momento Sánchez fue aplaudido a su regreso de Bruselas por todo su gabinete, Iglesias incluido, por el acuerdo alcanzado. Una imagen de unidad, convenientemente distribuida entonces por el aparato de propaganda de la Moncloa, que hoy se antoja muy lejana.

"Sin apoyo de Sánchez"

Desde Podemos restan importancia a los episodios de tensión y al enfado de la parte socialista del Gobierno. Fuentes del partido morado aseguran incluso que, en todo caso, esos dirigentes del PSOE son "personas concretas, sin apoyo de Sánchez".

En la citada entrevista de RAC 1, Iglesias insistía en que su relación con el jefe del Ejecutivo es "buena", pero subrayaba sus diferencias a nivel ideológico. "Él encabeza un partido abiertamente monárquico, y que además se está destacando por la defensa de la Monarquía", afirmaba Iglesias, que apuntaba a la Vivienda, la Sanidad Pública o las pensiones como asuntos en los que "pensamos muy diferente".

La negociación de la Ley de Vivienda, cuya aprobación está prevista en principio para este mes de febrero, es una de las que más está tensando la relación entre socios. Se trata de una norma que deben elaborar el Ministerio de Transportes de José Luis Ábalos y la vicepresidencia segunda. Podemos ya está poniendo exigencias más allá de las iniciales, como rebajar sustancialmente la condición para ser considerado un gran tenedor de vivienda. 

Robles contra Iglesias 

En público volvía a ser la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien llevaba la voz cantante de la crítica a Iglesias. Lo hacía en declaraciones a la prensa este jueves después de un acto con militares, donde replicaba las polémicas palabras del líder de Podemos sobre la falta de "normalidad democrática" en nuestro país por, entre otras cosas y a juicio del vicepresidente segundo, la situación de Oriol Junqueras, encarcelado tras su condena por sedición, y la de Carles Puigdemont, fugado de la Justicia desde 2017.

"España es un gran país, España es una democracia plena, es una democracia consolidada", zanjaba Robles.

Como en ocasiones anteriores, la número dos de Iglesias en la vicepresidencia, la secretaria de Estado de Agenda 2030 Ione Belarra, en una acción no autónoma sino coordinada con su jefe de filas, empuñaba Twitter para arremeter contra la titular de Defensa. Lo hacía, además, aludiendo a la venta de armamento a Arabia Saudí, algo que a su juicio justifica los reproches de Iglesias a la democracia española.

La propia portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, atribuía el pasado martes las declaraciones de los últimos días de Iglesias a la campaña catalana, pero entre algunos de los socialistas cunde la impresión de que la cosa puede seguir más allá de la cita con las urnas.

Haciendo acopio de posibles roces, aparecen en el horizonte algunos otros asuntos, como la Ley Trans que enfrenta a la vicepresidenta Carmen Calvo con la ministra de Igualdad, Irene Montero, o la reforma sobre los llamados "delitos de opinión", que ya esta misma semana ha provocado una disputa por ver quién se apuntaba el tanto. El Ministerio de Justicia, del socialista Juan Carlos Campo, anunció una norma el lunes por la noche cuando Podemos la presentaba, de manera más articulada, el martes por la mañana en el Congreso. 

Para Iglesias, las recientes condenas como la del rapero Pablo Hasel -a punto de cumplir una pena de nueve meses por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Monarquía- justifican, junto a la situación de los políticos que encabezaron el golpe secesionista en 2017, su afirmación de que no existe plena "normalidad democrática" en nuestro país. Hasta el punto de haber solicitado el indulto para el rapero. 

La tramitación de esa norma y la consecuente discusión sobre cómo se rebajan o eliminan las penas para delitos como el de la apología del terrorismo provocarán, a buen seguro, nuevas tensiones entre los socios de Gobierno.