El PSOE considera que la negociación con el PP sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se ha "frustrado" por culpa de los populares y que está, incluso, "rota". Por ello, los socialistas instan al líder de la oposición, Pablo Casado, a ser el que ahora dé el "siguiente paso". Así lo aseguraba este lunes, tras la reunión de la Ejecutiva permanente, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona.
Los de Pedro Sánchez niegan, además, que haya habido equívoco o engaño alguno con el nombre de los magistrados propuestos para el órgano de gobierno de los jueces, singularmente los que pretendía incluir en el mismo Podemos, el magistrado José Ricardo de Prada, ponente de la sentencia sobre la trama Gürtel que ocasionó la moción de censura contra Mariano Rajoy en 2018, y Victoria Rosell, actual delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, dentro del ministerio de Igualdad, y antigua diputada de los de Pablo Iglesias.
"El PP conocía los nombres desde hace tiempo. No es cierto que esto sea una cuestión de los últimos días" afirmaba Narbona desde la sala de prensa de la sede socialista en Ferraz. La presidenta del PSOE asegura que incluso esto era así en octubre, después de la moción de censura de Vox que desbloqueó en parte las negociaciones entre los dos grandes partidos.
"Ningún impedimento"
Narbona subrayaba además que por parte socialista no se ha puesto, afirmaba, "ningún impedimento a los nombres que ha proporcionado el PP. Creemos que debería darse la misma circunstancia con respecto a nombres que ya estuvieron encima de la mesa" concluía en referencia a De Prada y Rosell.
La presidenta socialista lamentaba el frenazo de las negociaciones después del deshielo institucional que supuso la semana pasada el acuerdo para nombrar al nuevo consejo de Radio Televisión Española (RTVE).
Un pacto fruto de un "consenso", subrayaba la representante socialista, que no se había producido desde tiempos del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, cuando se nombró a Luis Fernández presidente del Ente público, cargo que ahora ostentará José Manuel Pérez Tornero.
Para Cristina Narbona, el parón a las negociaciones para nombrar un nuevo CGPJ supone "una mala noticia desde el punto de vista de la salud de las instituciones democráticas en nuestro país". Además, es la prueba, a su juicio, de que el PP "sigue instalado en los vetos" por "miedo a Vox". Una reflexión que ligaba a los desencuentros entre el Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno y Vox como consecuencia del rechazo de los de Santiago Abascal al llamado "pin parental".
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