En el seno del Ministerio del Interior no quieren que vuelvan a producirse imágenes como las de los disturbios de la semana pasada durante el acto de Vox en la denominada 'Plaza Roja' de Vallecas. Y mucho menos en un acto político, sea de la formación política que sea. Es por ese motivo que diversos despliegues policiales custodian estos días los mítines que la formación está ofreciendo, siguiendo su estrategia de campaña, en los barrios obreros de Madrid.
Este jueves por ejemplo, la formación de ultra derecha ofrece un nuevo acto de su campaña electoral en Moratalaz. Y allí acudirán, según ha confirmado EL ESPAÑOL a través de diversas fuentes policiales, 5 grupos de las Unidades de Intervención Policial (UIP), los conocidos como antidisturbios.
Entre 200 y 250 agentes sobre el papel es la cifra que se destinará a este nuevo mitin para evitar escenas violentas tales como las vividas hace tan solo 10 días.
En el seno de estos grupos están habituados a toda clase de escenas de tensión y actuaciones similares cada pocos días. La cifra que acudirá al lugar ante la previsible movilización de grupos similares a los que organizaron las protestas les ha llevado a replantearse la estrategia para que nada similar vuelva a ocurrir. "Lo que está claro es que lo del otro día en Vallecas no se va a permitir", aseguran estas fuentes.
Convocatorias
El partido de Santiago Abascal, entretanto, prosigue con su estrategia de campaña centrándose en aquellas zonas de voto obrero en lAs que pretende acrecentar el número de electores que lograron depositar su confianza en ellos hace dos años, en los anteriores comicios autonómicos. Este jueves, sin ir más lejos, Javier Ortega-Smith fue el principal representante del mitin ofrecido en el Parque de los Ángeles, en Villaverde.
Él mismo hará lo propio este viernes en Moratalaz. Ante esa convocatoria, tal y como ocurrió los días anteriores al acto de precampaña en Vallecas, circulan otras por diversos grupos de Whatsapp, Telegram y distintas redes sociales aleccionando a acudir a esos lugares para mostrar el rechazo a la presencia de Vox en esos barrios.
"Moratalaz en pie contra la extrema derecha", reza una imagen distribuida de ese modo en estos últimos días. "Su aparición en los barrios obreros, a los que no acuden si no es en campaña electoral, es un acto de provocación para quienes vivimos en ellos".
Ante la posibilidad de que efectivamente se produzcan estas otras congregaciones paralelas y que en ellas haya radicales violentos generando disturbios como los vividos en Vallecas, desde la Policía Nacional se ha optado por la prevención. Y por un amplio despliegue policial.
A última hora del jueves, sin embargo, circulaba otra imagen por distintos grupos diciendo que la convocatoria a modo de rechazo contra el acto electoral de Vox en Moratalaz se había cancelado. Los agentes, a priori, mantendrán el dispositivo.
¿Efectivos suficientes?
Las fuentes policiales consultadas en el seno de las unidades antidisturbios discrepan en cuanto a si en Vallecas las fuerzas, los recursos y los efectivos empleados fueron suficientes. Pese a todo,
Algunos argumentan que se permitió acercarse demasiado a quienes estaban en contra del mitin, propiciando escenas de tensión. Uno de los policías, tras las primeras cargas, concretamente un subinspector de la UIP, llegó a ser pateado en plena trifulca. "Eso no puede pasar. Se puede medir distancias para que no se acerquen tanto. Tenemos medios para ello. Ahí ya estaba perdida la distancia", argumenta uno de ellos a EL ESPAÑOL.
Si bien el dispositivo resultó en apariencia considerable, los diez primeros minutos desde el inicio de los disturbios -cuando Abascal se aproximó a la primera fila de los manifestantes- convirtieron ese enclave de Vallecas en un lugar altamente caótico. La protesta y el lanzamiento de diversos proyectiles no se consiguió evitar.
El saldo final de aquella tarde de alto voltaje fue de 34 heridos, 20 de ellos agentes de la Policía Nacional. Diez días después, los investigadores ya han logrado detener a 13 personas por las agresiones, los lanzamientos de adoquines y botellas y los enfrentamientos con los antidisturbios. Ccon los férreos dispositivos que se están implementando para los próximos días, estas son la clase de escenas que Interior pretende evitar.