La Embajada de España en Venezuela está desbordada. La Fundación España Salud (FES), creada y controlada por la Embajada, sostiene que ya tiene prácticamente agotado su presupuesto anual para garantizar la asistencia sanitaria a los residentes españoles que sufren dificultades económicas.
La Fundación España Salud (FES) ha recibido durante los últimos años más de 20 millones de euros públicos del Gobierno central y tres Ejecutivos autonómicos (los de Galicia, Canarias y Asturias) para dar atención sanitaria a los españoles que residen en Venezuela. Sin embargo, durante los últimos meses ha denegado numerosas peticiones de ayuda, alegando que se ha quedado sin prespuesto.
EL ESPAÑOL ha tenido acceso a una grabación en la que un alto funcionario de la Embajada en Caracas aconseja a un matrimonio que, si tiene problemas de salud, es mejor que "se vuelvan a España".
La pareja había solicitado la ayuda de la Fundación FES porque el marido, Manuel López, precisa implantarse un resincronizador cardíaco (un dispositivo similar a un marcapasos) tras sufrir una cardiopatía isquémica. Después de que la FES le retirara, en enero de 2020, la asistencia médica, el matrimonio organizó sin éxito una colecta para regresar a España, con el fin de que él pueda someterse a esta intervención quirúrgica.
Aunque la Fundación España Salud (FES) fue creada precisamente para este fin, el funcionario de la Embajada alega en la conversación que el Gobierno español no tiene ninguna obligación de darles esta ayuda: "España no va a dar asistencia a cinco millones de españoles que están en el exterior. Tendríamos que empezar a construir hospitales en Cuba, aquí, en Argentina…"
También sugiere que muchos de los beneficiarios de la FES no merecen en realidad esta ayuda, ya que aunque tienen nacionalidad española, ni siquiera saben dónde está Madrid: "Algunos me dicen que son españoles, y luego me ponen que la capital de España es Toledo. O que han nacido en algún lugar entre Valencia y Canarias. Esto es así. Una persona que no sabe de dónde es...".
El funcionario alude a que acuden a pedir ayuda de la FES muchos venezolanos, hijos de inmigrantes españoles, pero que nunca han pisado España.
Fuentes diplomáticas explican que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero creó la fundación FES en 2006 como un mecanismo para captar el voto de los españoles residentes en Venezuela, ya que es especialmente numerosa la colonia procedente de Galicia, Canarias y Asturias.
Para ello, el ministro Jesús Caldera puso al frente de la fundación al consejero de Trabajo de la Embajada, el exdiputado socialista José Francisco Armas, al que el Gobierno de Felipe González había concedido el indulto tras ser condenado a seis años de cárcel por un delito de prevariación.
Tras el paréntesis del Gobierno de Rajoy, Armas vuelve a ser consejero de Trabajo de la Embajada de España en Venezuela y, a efectos prácticos, responsable directo de la gestión de la FES.
Nombramientos políticos
En el actual pacto de Gobierno, se ha abierto una pugna entre el PSOE y Podemos para designar altos cargos (como los de consejero de Trabajo o Cultura) en las Embajadas en el exterior. Una comisión formada por ambos partidos resuelve ahora estos nombramientos, dando un cariz político a la representación diplomática española.
La presidencia de la Fundación España Salud (FES) corresponde al embajador de España en Venezuela, un cargo que actualmente permanece vacante. El Gobierno de Pedro Sánchez destituyó a Jesús Silva como embajador en Venezuela en noviembre de 2020, pocos días después de que el líder opositor Leopoldo López abandonara su residencia oficial, en la que había permanecido refugiado durante varios meses, para huir a España.
Desde entonces, el responsable de la legación diplomática ha sido el ex embajador de España en Cuba, Juan Fernández Trigo, quien tras la última remodelación de Gobierno se ha convertido en el nuevo secretario de Estado para Iberoamérica y el Caribe.
La conversación grabada en la sede de la Consejería de Trabajo de la Embajada española en Caracas, que reproduce EL ESPAÑOL, se desarrolló en los siguientes términos:
Funcionario: La gente aquí está mal, está necesitada, como es natural. Si estuviéramos en Suiza no habría tanta gente pidiendo. Pero bueno, ¿por qué no os vais a España? ¿Porque no tenéis dinero para el billete, o qué?
Española: No, no hay dinero para el billete, no hay dinero para medicamentos...
Funcionario: Bueno, vamos a ver, es que yo creo… esto es un consejo personal: cuando uno está mal, está mejor en España.
Española: Claro.
Español: No, yo estoy de acuerdo.
Española: De hecho nosotros abrimos un crowdfunding para poder recoger dinero y que él se vaya, porque necesita implantarse un marcapasos. Este es el tema. Por parte del Estado español hay una obligación…
Funcionario: Bueno, vamos a ver. El Estado español no protege a los nacionales fuera como en España. Tampoco sé si tiene que hacerlo, no lo sé, de momento no hay esa decisión política. Me perdonáis, pero quiero decir… vosotros estáis vinculados a España, pero aquí hay gente que no sabe cuál es la capital de España. Y tienen el mismo pasaporte que vosotros. Lo he conocido.
Española: Yo eso lo entiendo, pero…
Funcionario: Yo he hecho un examen aquí para un auxiliar administrativo, me llaman y me recomiendan: no, que es española. Y me pone que la capital de España es Toledo. Esto es así. Yo me acuerdo cuando llegué aquí que fui a Cancillería y me entrevisto con una alta funcionaria de la Cancillería. Ay, que alegría de conocerlo, porque usted es de España... Porque nosotros somos españoles. ¿Y de dónde sois? Pues no lo sé, de un lugar entre Valencia y Canarias. Esto es así (...) Una persona que no sabe de dónde es...
Española: No, eso ya es pasarse, pero es un tema de legislación. Yo entiendo que uno puede tener su opinión desde el punto de vista personal y verlo así. Pero el tema es que la legislación dice lo que dice.
Funcionario: No, si yo no entro en política (...). Lo que te quiero decir es que España no va a dar asistencia a cinco millones de españoles que están en el exterior. Tendríamos que empezar a construir hospitales en Cuba, aquí, en Argentina…
Española: Claro. Pero hay una reglamentación, está la Ley...
Funcionario: Está la Fundación España Salud (FES) para los españoles en el exterior. Pero ahí está Cuba, que hay 260.000 españoles...
La FES especuló con dólares
Como ha informado EL ESPAÑOL, Manuel López se vio obligado a recurrir a la Justicia española y logró que, el pasado 7 de abril, la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) le reconociera el derecho a recibir de la Fundación España Salud (FES) la atención sanitaria precisa para implantarse el resincronizador cardíaco.
La fundación acató la decisión judicial a regañadientes alegando que es "una institución venezolana de derecho privado, por lo que las decisiones de los tribunales españoles no nos son vinculantes". Lo cierto es que FES fue creada en 2006 por el Gobierno español y los principales cargos de sus órganos de dirección son funcionarios de la Embajada, pese a lo cual sostiene que no está obligada a cumplir las sentencias de los tribunales españoles.
Precisamente una sentencia dictada el pasado 31 de mayo por el Departamento Segundo de la Sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas determinó que la Fundación España Salud (FES) especuló con dólares en el mercado paralelo (algo que es un delito en aquel país) y cometió numerosas irregularidades en los expedientes de ayuda a los españoles residentes en Venezuela.