El juez Rafael Lasala, titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Zaragoza e instructor del 'caso Ghali', acaba de dar un plazo de 5 días al Ministerio del Interior para que explique quién fue el confidente que dio el chivatazo mediante el cual los responsables de la cartera dirigida por Fernando Grande-Marlaska conocieron que se iba a acoger al líder del Frente Polisario en España. 

En una providencia a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el magistrado exige a la Comisaría General de la Policía Judicial que informe al juzgado sobre ese aviso en el Ministerio de Interior entre el 18 y el 23 de abril de 2021.

Es decir, desde el día en que Brahim Ghali entró por el aeropuerto de Zaragoza presuntamente sin pasar ningún tipo de control de pasaportes y hasta cinco jornadas después, las primeras de su convalecencia hospitalaria en Logroño, donde ingresó aportando la identidad falsa de Mohamed Benbatouche.

En aquel momento, tal y como avanzó este periódico y confirmó el comisario general de Información en su declaración como testigo ante el juez, Ghali estaba siendo investigado en la Audiencia Nacional en dos causas diferentes por los delitos de detención ilegal, torturas y crímenes de lesa humanidad.

A la vista de lo declarado por una testigo y uno de los investigados -Camilo Villarino, mano derecha de la exministra Arancha González Laya-, Lasala quiere aclarar y contrastar las diferentes versiones para esclarecer cómo sucedió todo realmente.

Por eso pide que se le informe "sobre el aviso que hizo a los responsables del Ministerio de Interior entre el 18 y el 23 de abril de 2021, advirtiendo que tenía que poner en conocimiento del Juzgado Central de Instrucción la presencia de Ghali en España". El magistrado quiere así que se le especifique el "medio que se empleó, a quién se dio tal aviso, la fecha exacta que se realizó y en virtud de qué procedimiento". 

El confidente

Hace varios días, El comisario jefe de Información de la Policía Nacional, Eugenio Pereiro, explicó que una fuente le informó de que el líder del Polisario estaba de camino a España. Esa persona le dio el chivatazo poco antes de que aterrizara el avión argelino que le transportaba hasta la Base Aérea de Zaragoza.

En su comparecencia como testigo ante el titular del Juzgado de Instrucción nº 7 de Zaragoza, Rafael Lasala, no identificó a la persona le proporcionó esa información. Lo hizo amparándose en la ley de secretos oficiales porque se trata de una fuente de información confidencial.

Eso sí, en cuanto tuvo esos detalles en su poder se los trasladó al Director Adjunto Operación, José Ángel González, su superior directo, el principal mando del cuerpo solo por detrás del Director General de la Policía. Incluso preparó y diseñó el operativo para escoltar la ambulancia que le trasladó desde Aragón a La Rioja. 

La declaración del comisario contrastaba con la ofrecida hace más de un mes por Susana Crisóstomo, jefa de Gabinete de Marlaska. Crisóstomo negó tener conocimiento de la llegada de Ghali. Aseguró haberse enterado por la prensa varios días después de lo que contó el comisario jefe de Información. Según ella, el 23 de abril.

En ese entonces, Marlaska ordenó que llamase a Exteriores para avisar más tarde a la Audiencia Nacional. Ahora el juez quiere conocer exactamente todos los detalles de lo que se sabía y lo que no y de lo que se hizo en Interior antes, durante y después de la llegada de Ghali a España.

Ingreso en el hospital

Esa información, en aquel momento ya era conocida por la entonces ministra de Asuntos Exteriores y su jefe de gabinete -ambos investigados en la causa- varios días antes de que el líder del Polisario llegase a territorio nacional. Ambos lo reconocieron durante sus interrogatorios.

Lasala atiende así a las peticiones de los letrados de las acusaciones, Antonio Urdiales y Juan Carlos Navarro. En la providencia recuerda también que sigue esperando el oficio para identificar a la persona que tomó los datos a Ghali a su entrada en el Hospital San Pedro de Logroño. Así se podrá conocer cómo se gestó ese ingreso en el que se aportó una identidad falsa, expedida en Argelia el mismo día en que el avión despegó para llevarle a suelo español.

Puesto que en la declaración de Camilo Villarino éste hizo constar que pidió que se le hiciera una nota sobre Brahim Ghali, y le enviaron un dossier, el juez exige también a la Abogacía del Estado, que representa al jefe de Gabinete de Laya, para que en un plazo de tres días lo aporte a la causa.

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