Manual de resistencia en Moncloa: Sánchez pide a Podemos centrarse en la legislatura y ganar tiempo
El presidente advierte a sus socios del desgaste que atraviesan y apostarán por leyes de izquierdas que les permitan recuperar la confianza de ERC
9 mayo, 2022 02:32Noticias relacionadas
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Mantenerse unidos ante un panorama nada favorable y así lograr completar la legislatura. Ese es uno de los mensajes que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha transmitido en los últimos días a sus socios de Unidas Podemos. El motivo de este aviso es el desgaste que sufre actualmente el Ejecutivo, que está inmerso en el escándalo del espionaje con Pegasus y ha puesto en riesgo su ya débil alianza con ERC. Un peligro que se suma al empuje del nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha caído de pie en la política nacional en un momento muy delicado para Sánchez y los suyos.
La alerta del presidente llega tras los desafíos que ha tenido que afrontar su Consejo de Ministros en los últimos tres meses. Tras haber superado lo peor de la pandemia, gracias a una campaña de vacunación que convenció a más del 80% de la población, Moncloa empezó desde el inicio de 2022 a acumular golpes. A una inflación que ya era preocupante se sumó la invasión rusa de Ucrania. Este conflicto agravó lo que actualmente es una crisis económica por el encarecimiento del coste de la vida. Y ha provocado tensiones internas entre PSOE y UP por las medidas para combatirlo.
Otro foco está en la relación con el independentismo catalán. El caso Pegasus ha sido un punto de inflexión en el vínculo que ha mantenido Sánchez con los líderes del separatismo desde que llegó al poder. Las exigencias del president catalán, Pere Aragonès, y de ERC de que se den explicaciones por el supuesto espionaje a más de 60 independentistas ya activaron las alarmas. Tampoco ayudó que se conociera que las escuchas a Aragonès fueron por orden judicial. Un ejemplo de este desencuentro se vio en la votación del decreto de medidas contra la guerra, el cual salió adelante pero con el 'no' de Esquerra.
Las estrategias ante la crisis
La fuerza de Feijóo tampoco contribuye a apaciguar los nervios de socialistas y morados. El nuevo jefe de filas del PP ha logrado proyectarse como la alternativa a Sánchez. Ahora, incluso podrá confrontar con el presidente en el Senado, ya que la dimisión de un senador de su partido le permitirá ingresar en la Cámara Alta próximamente. Dicha situación traerá los primeros enfrentamientos públicos entre ambos. A esto se suma la solidez de Vox, que sigue con buenas expectativas en las encuestas.
Todas estas circunstancias han llevado a la coalición de gobierno a temer un posible fin de etapa forzado por un adelanto electoral. Unos comicios en los que son conscientes de que tendrían muy complicado poder repetir la fórmula que les permite controlar el Ejecutivo desde 2019. Los sondeos que apuntan a la posibilidad de una suma suficiente entre Feijóo y Santiago Abascal son la mayor explicación a ese temor. Por lo que ya se han visto obligados a pensar en cómo dar la vuelta a la situación.
Por el lado socialista, Sánchez y el PSOE tienen en mente impulsar una agenda legislativa en la que las leyes consideradas de izquierdas tengan protagonismo. Estas normas, basadas en nuevos derechos o en reformas de carácter social, servirían para que ERC pudiera recuperar su confianza en la gestión del presidente. Es decir, se plantearían medidas a las que los separatistas tendrían muy difícil decir que no. La duda es si esto funcionaría con los últimos antecedentes.
En Podemos también tienen claro que deben moverse. Pero, en este caso, por su propia supervivencia. Los de Ione Belarra pretenden demostrar que son útiles como fuerza de gobierno y que son la auténtica alternativa a los socialistas. Uno de sus principales argumentos será advertir de los peligros que puede entrañar una influencia de Vox en el Gobierno central. Por ello, recordarán algunas de las medidas de las que presumen, como las subidas del salario mínimo o la creación del Ingreso Mínimo Vital (IMV).
Tema aparte es la relación entre Yolanda Díaz y los morados. La vicepresidenta sigue adelante con su "proceso de escucha" para lanzar una candidatura en las próximas generales. El gran ensayo de esta fórmula iba a producirse en las elecciones andaluzas del 19 de junio. Pero el registro fallido de la coalición por haber presentado la documentación fuera de plazo ha puesto en riesgo que esta vaya a salir adelante.
Andalucía será precisamente la primera gran prueba de Sánchez y su gobierno. El sondeo publicado por EL ESPAÑOL apunta a una victoria ajustada del PP de Juanma Moreno, que aun así sacaría más de diez escaños al PSOE andaluz que lidera Juan Espadas. Una derrota en una plaza tan codiciada puede ser otro golpe para los intereses de Moncloa. Por eso consideran que la unidad entre socios puede ayudarles a sobrevivir. Está por ver si las tensiones internas les permiten aguantar hasta finales de 2023, cuando el presidente prevé convocar las generales.