Tanto la oposición como sus propios socios de Gobierno -Unidas Podemos, ERC, PNV o Bildu- han criticado este lunes durante un debate en la Eurocámara la gestión que ha hecho Pedro Sánchez del asalto masivo a la valla de Melilla ocurrido el pasado 24 de junio, un suceso en el que perdieron la vida al menos 23 inmigrantes.
Por su parte, la comisaria de Interior, la socialista sueca Ylva Johansson, ha tachado de "inaceptable" lo ocurrido y ha reclamado una investigación, aunque ha negado que esta vez se trate de un intento de Marruecos de presionar a la Unión Europea.
"Es inaceptable que la gente intente pasar por la fuerza la frontera de la UE utilizando medios violentos. Y es inaceptable que la gente muera de esta manera en nuestra frontera europea", ha dicho Johansson en su intervención en el pleno.
"Apoyo firmemente los llamamientos por parte de Naciones Unidas y de la Unión Africana para que se investigue esta trágica pérdida de vidas humanas", ha agregado la comisaria de Interior, que celebra que tanto la Fiscalía española como la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Marruecos hayan anunciado iniciativas en este sentido.
Eso sí, Johansson ha eludido hacer ninguna crítica ni a la actuación de España ni a la de Marruecos en el incidente. Sobre Sánchez, la comisaria de Interior ha dicho que "tenemos una muy buena colaboración con España y estoy en estrecho contacto con el Gobierno español".
En cuanto a la actuación de Rabat, Johansson ha resaltado que "Marruecos es un socio estratégico clave de la UE para gestionar la migración y combatir el tráfico de seres humanos: Sólo este año, Marruecos ha evitado 26.000 salidas irregulares, una décima parte de las cuales salvadas en el mar".
"Tengo previsto seguir dialogando con Marruecos para discutir los trágicos acontecimientos en Melilla y reforzar todavía más nuestra asociación global en materia migratoria", ha agregado, sin dar más detalles.
Para el portavoz del PP en este debate, Juan Ignacio Zoido, lo ocurrido en Melilla "es una tragedia sin paliativos que no puede calificarse de asunto bien resuelto como hizo Pedro Sánchez". "No está bien resuelta la política migratoria, errática y de bandazos, que ha pasado del efecto llamada del Aquarius y la retirada de las concertinas a la actual complacencia ante el desastre humanitario", ha afirmado Zoido.
[La Fiscalía abre una investigación por las muertes ocurridas durante el salto a la valla de Melilla]
Por su parte, el representante de Ciudadanos, Jordi Cañas, ha puesto el acento en la gestión de Marruecos, que a su juicio "es una mezcla de negligencia e incapacidad unida a una indecente utilización política del drama migratorio como mecanismo para presionar a España y al conjunto de la UE".
La eurodiputada de Izquierda Unida, Sira Rego, ha tachado de "racista" la política migratoria de la UE por cerrar las puertas a los migrantes africanos mientras se acoge sin problemas a los ucranianos. Y ha exigido una investigación para "depurar las responsabilidades de esta masacre".
Por su parte, Miguel Urbán, que ha abandonado Podemos y ahora milita en Anticapitalistas, ha ido un paso más allá y ha reclamado la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. A su juicio, las muertes en la frontera de Melilla son "una masacre", entre cuyos responsables se encuentran "el Gobierno español y la criminal política europea de externalización de fronteras que subcontrata a dictaduras como la marroquí para que haga de matones de frontera".
La portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya, Diana Riba, ha tachado de "bochornosas" las declaraciones de Pedro Sánchez en las que habló de una operación "bien resuelta" y ha acusado al presidente del Gobierno de asumir el lenguaje de la extrema derecha.
El representante de Bildu, Pernando Barrena, también ha hablado de una "pésima gestión del Gobierno español", mientras que la eurodiputada del Partido Nacionalista Vasco, Izaskun Bilbao, ha exigido una "investigación inmediata e independiente" sobre la actuación policial "a ambos lados de la frontera".
En defensa de Sánchez sólo han salido los eurodiputados del PSOE. Juan Fernando López Aguilar ha destacado que la tragedia "no ha pasado en Melilla, ha pasado al otro lado de la frontera entre España y Marruecos". López Aguilar ha dicho además que Marruecos "soporta una importante presión migratoria de personas procedentes del África Subsahariana" y ha culpado de lo sucedido a "las mafias que explotan a seres humanos".