"Quien me conoce sabe que soy una persona de sentido común", ha afirmado Luis Salvador, alcalde de Granada. La mañana de este martes ha sido una sucesión de hechos que ha dejado a Salvador enrocado en su puesto con el único apoyo de José Antonio Huertas. "Me quedo porque me eligieron", ha afirmado Salvador.
Los seis concejales del PP y dos de Cs han abandonado el equipo de gobierno. Hace dos semanas comenzaba el baile: el que fuera presidente del PP de Granada abandonaba el partido y dejaba con trece ediles al equipo de gobierno. La mayoría absoluta está en 14. Hoy se ha quedado Salvador sólo con Huertas al mando de la ciudad.
"El alcalde tiene funciones suficientes como para permitir que la ciudad siga funcionando". Ha criticado la "irresponsabilidad" de todos los ediles que le han abandonado y ha instado al PP a volver al gobierno. "Absoluta tranquilidad, la ciudad va a seguir funcionando".
Salvador ha dejado claro que no va a dimitir. "Los que piden la dimisión es porque quieren ponerse ellos al poder". En una larga comparecencia en la que ha lanzado mensajes al PP y a sus excompañeros de Cs; igualmente, no ha querido responder de forma directa a su posible apoyo al PSOE.
Ha eludido hacer autocrítica, ha evitado afrontar el problema de la gobernabilidad de Granada y ha exigido a los populares "que vuelvan", porque piensa que "está actuando la disciplina de partido" frente al trabajo por Granada.
A primera hora de la mañana, Francisco Rodríguez, presidente popular de Granada, anunciaba que se acababa la relación entre Cs y PP. Todos los ediles dimitían por escrito y lo registraban al mediodía en la plaza del Carmen. A esto hay que sumar las dos salidas de Lucía Garrido y Manuel Olivares, hasta ahora miembros de Cs.
Esta situación deja a Salvador sólo al frente de un Pleno municipal con 27 concejales. De ellos, 25 están en contra (o al menos no están a favor) de que el alcalde siga al frente de la ciudad. "Hay gente que tiene interés en crear una crisis, yo tengo interés en seguir trabajando".
En este sentido, ha afirmado que va a hablar "con todos los grupos", excepto con los no adscritos. "Para hablar con ellos, hablaremos con sus grupos para que le extiendan las conversaciones". Así, se entrevé la crítica a la salida de Sebastián Pérez, expresidente del PP de Granada y que se dio de baja hace dos semanas, y a los dos excompañeros de Cs.
Cs, roto
Los concejales Lucía Garrido y Manuel Olivares anunciaban su salida del Grupo Municipal de Ciudadanos. Garrido, que concurrió a las municipales como independiente, ha comparecido sólo en la parte inicial. Tras anunciar su salida del gobierno, ha dejado la palabra a uno de los hombres de los que más se ha hablado en estos días.
Olivares ha anunciado que, además, se ha dado de baja como militante de Cs. Sobre su acercamiento al PP, ha confirmado que no prevé afiliarse a este partido. "Seguiré trabajando por Granada desde la oposición", porque, según su opinión, la ciudad necesita avanzar: "No abandono mi acta de concejal. Tenemos un compromiso con los ciudadanos más que con unas siglas, sería una traición no seguir".
El grupo de Cs está roto por la mitad. Mientras Olivares y Garrido ya están fuera, al lado de Salvador sólo queda José Antonio Huertas. Salvador y Huertas han estado juntos toda la mañana. Ambos han aparecido a las 12:50 en la comparecencia en la que Salvador ha sacado toda su artillería contra el PP.
En este sentido, Luis Salvador ha dejado claro que detrás de toda la operación está la mano de Fran Hervías. "Ahora el portavoz de Cs será Huertas, no Olivares, alumno aventajado y a las órdenes de Hervías". Y ha aumentado el tono de la crítica, exigiendo a Olivares que entregue su acta de concejal.
Pleno de investidura
El PP de Granada ha pedido la convocatoria de un pleno de investidura. De este modo, los populares buscan que Luis González sea el futuro alcalde de Granada y que no se produzca una moción de censura. Si los concejales no adscritos apoyan al PP, sumarían 9 concejales más los tres de Vox.
Por su parte, en una moción de censura, los votos que reuniría el bloque de izquierdas sumarían trece y daría el gobierno al socialista Paco Cuenca por mayoría simple. En todo caso, Salvador se parapeta en el pacto antitransfuguismo para aferrarse a la vara de mando.
Por su parte, Elías Bendodo, portavoz de la Junta de Andalucía, ha eludido hacer declaraciones al respecto: "Estos comentarios, en mi partido (PP) se hacen en San Fernando, no en San Telmo", en referencia a la sede autonómica de los populares y a la del Gobierno andaluz. De cualquier modo, aleja la posibilidad de que la situación en Granada pueda afectar negativamente al pacto de PP y Cs en Andalucía.