La huelga indefinida en el sector del metal de la provincia de Cádiz llega a su segunda jornada con nuevas barricadas en carreteras, neumáticos ardiendo y concentraciones en las puertas de Navantia, Dragados o Alestis, a las que el sector del metal presta servicio auxiliar.
La avenida de Astilleros de Cádiz capital es la vía más conflictiva, donde ha ardido un vehículo que los trabajadores han sacado del aparcamiento de los astilleros. La carretera se encuentra cortada al tráfico.
A las 10,45 horas, Adif se ha visto obligada a cortar los trenes en el interior de capital gaditana tras la colocación de una tubería de gran tamaño cortando la vía férrea que colinda con la entrada de la factoría de Navantia. Los trenes, por tanto, solo han podido circular con destino Cádiz hasta la Estación de Cortadura, a las afueras de la ciudad, hasta primera hora de la tarde.
En el Campo de Gibraltar también continúan las protestas. La Junta de Andalucía se ha visto obligada a pedir al Gobierno que tiene que dejar expedita la autovía para facilitar el acceso al Hospital de La Línea. En el centro sanitario los profesionales "acumulan horas de guardia seguidas, al no poder llegar los relevos debido al colapso de la carretera".
Parto en una ambulancia
El hospital se ha visto obligado a cancelar operaciones "por la imposibilidad de acceder de los cirujanos", y que ha habido que enviar una ambulancia medicalizada para que una mujer diera a luz en ella ante la imposibilidad de acceder al hospital.
Asimismo, los camiones de cáterin para los desayunos de los pacientes ingresados no han podido llegar. Aquellos pacientes que no pueden acceder se están derivando al hospital de Algeciras y "se ha pedido también que proporcionen helicópteros para seguir la máxima movilidad para pacientes prioritarios".
El consejero de Salud, Jesús Aguirre, ha afirmado que la situación "no es presentable desde el punto de vista clínico". En este sentido, ha señalado que la huelga no puede afectar la llegada a los hospitales, por lo que hay "garantizar el acceso a todos los pacientes y la calidad asistencial", algo que es "básico".
Dado el nivel que han adquirido las protestas en los accesos a los astilleros de Cádiz, Puerto Real y San Fernando, Navantia ha emitido un comunicado en el que "condena rotundamente los actos de violencia perpetrados".
La empresa ha lamentado "la acción de los llamados piquetes informativos, que han vulnerado el derecho a acceder a su puesto de trabajo a empleados no solo de la industria auxiliar sino de la propia Navantia. El derecho de huelga "debe ser compatible con el ejercicio de los derechos individuales".
También ha denunciado que los piquetes "han impedido la entrada de trabajadores de servicios esenciales, poniendo en riesgo de este modo la seguridad de los propios centros de trabajo".
La situación es, a juicio de la compañía, "especialmente grave en el centro de trabajo de Cádiz, donde los llamados piquetes informativos han accedido a las instalaciones por métodos violentos y han utilizado y dañado material de trabajo del astillero para hacer barricadas".
Recuerda Navantia además que el mantenimiento de determinados servicios esenciales "persigue garantizar el cumplimiento de los compromisos contractuales y, de este modo, evitar riesgos de cara a futuros contratos que generan carga de trabajo y actividad económica para la comarca". Por último, la compañía ha animado "a FEMCA y a los representantes de los trabajadores" a proseguir la negociación con el fin de acordar un nuevo convenio colectivo.