
Casi un 14% de los jóvenes españoles piensa en el suicidio con mucha frecuencia. iStock
Más de un millar de universitarios de Andalucía ha pensado en suicidarse: así son los protocolos para protegerlos
Las universidades de Cádiz, Málaga, Almería, Granada y Sevilla ya tienen planes en marcha para frenar este tipo de conductas.
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Hasta 900 estudiantes de la Universidad de Granada han pensado que quitarse la vida puede acabar con sus problemas. Unos 40 han dicho lo mismo en la de Cádiz. En la de Almería no hay datos, pero en la ciudad fueron 73 personas quienes intentaron quitarse la vida el año pasado, según los últimos datos del Ayuntamiento. Las universidades han dicho basta.
Para ello, y de la mano de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación, han mantenido esta pasada semana un nuevo encuentro para avanzar en la puesta en marcha de un protocolo de prevención del suicidio. Quienes se sientan perdidos en esos pensamientos pueden acudir a ellos.
Las cifras preocupan. En la Universidad de Sevilla, la que tiene un alumnado más extenso de la comunidad, más de medio millar de estudiantes pidieron ayuda psicológica el año pasado por motivos tan dispares como agobio por los estudios o problemas de autoestima en el último año.
La prevención para que esas cuestiones no deriven en pensamientos suicidas es clave. "La intervención psicológica resultó clave para seguir progresando", confirman desde la Hispalense.
Según datos de la Universidad de Granada, hasta el 3,3 por ciento de sus estudiantes creen que "quitarse la vida es la solución a sus problemas". Para cualquiera que se sienta así, indican los expertos, pueden contar con el teléfono 024, donde pueden llamar para pedir ayuda. Y también con los planes que los centros superiores andaluces han puesto en marcha para evitar estas situaciones.
Planes en marcha
De las diez universidades públicas de la comunidad, cuatro ya cuentan con planes específicos para luchar contra los suicidios entre sus docentes, alumnos y personal. Son las de Cádiz, Málaga, Almería, Granada y Sevilla.
Para avanzar en el desarrollo de esos planes, el consejero de Universidades, José Carlos Gómez Villamandos, se ha reunido esta semana pasada con los responsables de los servicios de salud mental que desarrollan su labor en los diferentes campus.
Ésta es la segunda sesión de trabajo llevada a cabo sobre este asunto, después de que, el pasado 25 de noviembre de 2024, el titular de Universidad ya intercambiara impresiones con estos representantes de los gabinetes de psicología de las universidades.
En esta ocasión, el consejero tuvo "la oportunidad de analizar en detalle la propuesta del protocolo", que se está diseñando "en virtud de la experiencia y de las herramientas de las que disponen las distintas instituciones académicas".
Universidad de Málaga
Hay universidades, como la de Málaga (UMA), que plantean ideas prácticas si los docentes reciben mensajes del alumnado con ideaciones suicidas. Ahí, señala el protocolo, se deben poner en marcha una serie de medidas.
"¿Qué hacer y cómo actuar ante el riesgo de conducta suicida?", señala el documento que quiere prevenir este tipo de comportamientos. "El protocolo de la Universidad de Málaga recomienda primero "mantener una conversación con el alumno" que expresa ideas suicidas. En la misma se debe "mantener la calma y hablar del tema de forma natural".
Es importante, señalan, "escuchar y no interrumpir" para así "fomentar la empatía y hacer que el alumno se sienta comprendido".
En tercer lugar señala que hay que evitar "minimizar el problema". Tampoco se debe juzgar. El apoyo que se brinde a los alumnos que tienen aireaciones suicidas "debe servir como elemento de enlace entre el alumno y algún recurso de ayuda".
Llamar al 024
De esta forma, el profesorado "puede ser el que contacte con los recursos disponibles previa información al alumno". Además del ya sabido teléfono 024, la UMA tiene un mal y un teléfono de ayuda para su comunidad: udapsicologíacitas@uma.es y 952-122417.
En este caso, además del 024 (gratuito y 24 horas), se aconsejan los teléfonos 112 y el Teléfono de la Esperanza (717003717) para pedir ayuda en caso de tener pensamientos suicidas.
En el diseño de estos instrumentos de prevención, indican desde la Consejería de Universidades, está implicada, además de la Consejería de Universidad y las propias universidades, también la Consejería de Salud y Consumo, departamento de la Junta al que "se remitirá el documento, una vez que se consensue con los campus", según ha subrayado.
El siguiente paso que se dará será estudiar cómo se articula su implantación y la formación de los profesionales implicados en su puesta en marcha. En la reunión también se acordó empezar a trabajar en un convenio entre la Junta de Andalucía y los servicios de atención psicológica de las universidades para "desarrollar actividades de formación, sensibilización y buenas prácticas".
Salud mental
En ese contexto, Villamandos aseguró que "desde la Consejería se seguirá trabajando con celeridad en un tema tan relevante y sensible como éste, que constituye una prioridad para el Gobierno", teniendo en cuenta que existen varios estudios que precisamente alertan de la necesidad de promover, proteger y recuperar la salud mental, un problema que se agudizó con la pandemia de la Covid-19.
De hecho, uno de esos informes, el realizado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades publicado, pone de manifiesto que más del 50% del estudiantado tuvo la necesidad de apoyo psicológico por problemas de salud mental y más del 50% ha consultado alguna vez con algún profesional sanitario por un problema de este tipo.
Ante esta situación, Gómez Villamandos ha querido hacer hincapié en que el conjunto de las instituciones académicas públicas "están muy concienciadas con esta cuestión" y eso queda constatado con la existencia en todas ellas de unidades de atención psicológica y concienciación de salud mental para prevenir y ofrecer asistencia para todo aquel que lo necesite.
"Cada una tiene su propia estructura y organización, pero todas tienen como finalidad ofrecer atención personalizada y también grupal para proporcionar las herramientas que puedan mejorar el bienestar social y la calidad de vida de los miembros de la comunidad universitaria", ha apostillado.