Ximo Puig ficha con sueldo de alto cargo al líder de CCOO que dimitió por vacunarse como liberado
El Gobierno valenciano prepara un decreto para que el nuevo presidente del CES cobre como un director general. Antes este cargo carecía de salario.
21 octubre, 2021 01:17Noticias relacionadas
Arturo León, el secretario general de CCOO en la Comunidad Valenciana que dimitió en febrero por vacunarse como liberado sindical, acaba de tomar posesión como nuevo presidente del Comité Económico y Social (CES) de la autonomía. Su elección fue acordada el 22 de septiembre por el pleno del organismo y ratificada dos días después vía decreto por el Gobierno valenciano. Pero la publicación del Diario Oficial omitió un cambio relevante. El presidente, que antes no tenía salario fijo, cobrará en adelante como un alto cargo. Así lo confirmó este miércoles el propio sindicalista a EL ESPAÑOL.
"Se está tramitando un nuevo decreto para poder optar a una dedicación parcial o exclusiva", detalló a este periódico el hasta hace ocho meses líder valenciano de CCOO. La nueva remuneración ya ha recibido el visto bueno del pleno del CES y está a la espera de que la valide la Generalitat valenciana -que será quien corra con los gastos, según ha podido contrastar este medio-.
Fuentes internas del organismo trasladan que su sueldo será similar a la del secretario general del CES, que "tiene una retribución asimilada a los directores generales de la Generalitat". La web del comité precisa al respecto que en 2019, año del último balance publicado, este puesto contaba con un sueldo de "alto cargo", remunerado con 67.017,98 euros brutos anuales.
Está por ver la cifra exacta que percibirá finalmente Arturo León para los cuatro años de su mandato, si será igual a la del secretario general o variará. Pero será, en cualquier caso, muy superior a la que ingresaba el hasta ahora presidente del CES, Carlos Luis Alfonso Mellado, quien solo percibía "indemnizaciones" de alrededor de 500 euros por acudir a las juntas directivas (una vez al mes) o a los plenos (una vez cada dos meses).
"Estaba diseñado para que fuera un profesional libre quien ejerciera de presidente", explicó Arturo León este miércoles. En efecto, su antecesor es catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social y compaginaba su labor universitaria con el CES. La intención del sindicalista, en cambio, es abandonar su puesto de técnico de riesgos laborales en el Hospital Universitario de Alicante para dedicarse en exclusiva a la labor que le encomienda el Ejecutivo de Ximo Puig.
Órgano consultivo
El Comité Económico y Social es el órgano consultivo de la Generalitat Valenciana y de sus instituciones públicas en materia económica, sociolaboral y de empleo. Sus dictámenes no son vinculantes, pero sí determinantes para que salgan o no adelante las leyes autonómicas relacionadas con estas materias. Tanto es así que fue creado con "personalidad jurídica propia" para ejercer sus funciones "con plena autonomía orgánica y funcional, a fin de garantizar su objetividad e independencia".
Para asumir tal cometido la Generalitat Valenciana ha escogido a un dirigente sindical que tuvo que dimitir hace solo ocho meses por vacunarse como trabajador de su hospital cuando llevaba más de tres lustros sin ejercer en el mismo. León explicó al cesar que recibió la primera dosis de la vacuna de Pfizer el 15 de enero tras haber solicitado su reincorporación al Hospital Universitario de Alicante días antes, a principios de año.
Pero dos circunstancias dejaban su versión en entredicho y le llevaron a cesar. Por un lado, que la solicitud para su reincorporación no fue formalizada hasta el día 26, once días después de vacunarse. Por otro, que su reincorporación se producía, exactamente, tras 16 años sin desempeñar sus funciones en el hospital alicantino.
Arturo León defendió que "el desfase en las fechas se debe al retraso en la respuesta" por parte de la Conselleria de Sanidad, y subrayó que la Generalitat Valenciana ha repetido en varias ocasiones que su vacunación "fue legal". En efecto, fue tan legal como la de todos los liberados sindicales de la sanidad valenciana, cuya vacunación se produjo antes incluso que la de los facultativos de la sanidad privada y, en muchas ocasiones, antes también que la de médicos y enfermeras de primera línea de algunos hospitales del sistema público.
¿Por qué dimitió entonces? "Es una decisión muy meditada y voluntaria para preservar la buena reputación del sindicato y preservar a mi familia y seres queridos", argumentó en una rueda de prensa concedida el 10 de febrero. En su intervención rechazó que su marcha respondiera a una falta ética.
Sobre su futuro, manifestó entonces que pasaba por reincorporarse a su puesto de trabajo. Y por esta razón se puso sin demora la segunda dosis de la vacuna. "Yo tengo el derecho y el deber de vacunarme. La representación del primer sindicato en el hospital requiere la ejemplaridad de vacunarse", defendió.
Pero este miércoles, solo 250 días después, daba el salto a un cargo público amparado por el Gobierno valenciano. Su nombramiento lo firmó el presidente valenciano, Ximo Puig, junto a cuatro de sus consejeros: el también socialista Vicent Soler, titular de Hacienda; y tres de Compromís: Mónica Oltra (vicepresidenta) Rafael Climent (Economía) y Mireia Mollà (Agricultura).
Además, a su toma de posesión acudieron, además de Soler, las titulares de Justicia y Administración Pública (Gabriela Bravo, PSPV-PSOE) y Rosa Pérez Garijo (EUPV).