Carlos Mazón prepara una reducción masiva del IRPF a las rentas bajas en la Comunidad Valenciana

El presidente del Partido Popular de la Comunidad Valenciana y candidato a la Generalitat en las próximas elecciones, Carlos Mazón, anunciará en los próximos días su nueva propuesta de reforma fiscal para la autonomía. La misma, según confirman fuentes de su equipo económico a EL ESPAÑOL, incluirá una rebaja masiva del IRPF a las rentas bajas basada en una reducción de los tipos impositivos y una ampliación de los tramos para beneficiar a más gente.

Mazón ya anunció en octubre de 2021 su intención de acometer una "revolución fiscal" si accede a la Presidencia de la Generalitat. Pero, 16 meses después, ha decidido actualizarla por varias razones.

En primer lugar, la distinta situación económica, marcada por la inflación, que deriva en una menor capacidad adquisitiva del contribuyente. En segundo, el incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) impulsado por el Gobierno de España, que reduce el número de beneficiarios entre las rentas bajas planteadas inicialmente. Y, por último, la deflactación del IRPF aplicada por el socialista Ximo Puig, a la que los populares quieren responder de cara a las elecciones con una propuesta mucho más ambiciosa.

El objetivo de Mazón sigue siendo convertir la Comunidad Valenciana en "el lugar de España donde las rentas bajas paguen menos impuestos". Conseguirlo pasa por reducir el IRPF valenciano "al mínimo legal". Los ingresos por este tributo, según explicó en octubre de 2021, se reducirían en 800 millones.

Lograrlo implicaría, por un lado, reducir el porcentaje autonómico del impuesto en un punto hasta situarlo en "el mínimo legal", del 10% al 9%, según dijeron entonces. Esta propuesta ya se la arrebató el presidente Ximo Puig en su reforma fiscal anunciada el pasado septiembre.

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Por otro, la intención del PP es elevar un 10% el mínimo de la base liquidable que no se somete a tributación, que pasaría de 5.550 euros a 6.105. En consecuencia, menos rentas bajas pagarían IRPF y, en caso de hacerlo, el mínimo sería del 9%.

"Cambio sustancial"

Ahora, ante el incremento del IPC y del SMI, el PPCV ha decidido añadir "un cambio sustancial" para completar las medidas ya anunciadas y "volcarse en las clases bajas". Según anticipan a este periódico, la estrategia será "ajustar los tramos a la realidad actual" y aplicar a estos tramos "tipos más bajos".

La reforma aplicada por Ximo Puig dejó el siguiente escenario: el tipo aplicable al primer tramo se redujo del 10% al 9% para un máximo de renta de 12.000 euros. El segundo, en el 12% hasta los 22.000 euros. El tercero, en el 15% hasta los 32.000 euros. Y el cuarto, en el 17,5% hasta los 42.000 euros. La intención del PP es ensanchar estos máximos -los aplicables a las rentas más bajas- y aplicarles un porcentaje de IRPF inferior.

El conjunto de la reforma fiscal de Ximo Puig representa un ahorro total para el contribuyente de 150 millones de euros frente a los 1.530 de la propuesta por el PP, según las cifras trasladadas por cada uno de los candidatos. Pero el montante todavía podría ser superior en el caso del PP, según trasladan las mismas fuentes. "Variará, y en ningún caso será para recaudar más", aseguraron. La cifra final podría rondar los 1.600 millones.

Carlos Mazón (derecha), junto a su equipo económico. EE

El conjunto de la "revolución fiscal" que quiere poner en marcha Carlos Mazón si gobierna supone una rebaja de "todos los impuestos" y tendrá como consecuencia que "el 80% de los valencianos tendrá la menor carga fiscal de España".

Según los cálculos iniciales, la Generalitat Valenciana dejaría de ingresar los mencionados 1.530 millones de euros. Pero incrementaría un 1,5% el PIB autonómico, según estima el PPCV, lo que supondría compensar esta merma con 1.600 millones extra en ingresos, generados por una mayor actividad económica.

Entre los "tributos a reformar", además del IRPF, se encuentran el impuesto sobre el Patrimonio, el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, así como el impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (AJD).

Patrimonio, Sucesiones y Donaciones

La formación propone la supresión del impuesto de Patrimonio. Recuerda que este tributo "ya fue eliminado en 2008 por Zapatero por injusto, aunque recuperado en 2011 por la crisis". Su apuesta es taxativa: eliminarlo. Con ello la autonomía dejaría de ingresar un total de 150 millones anuales.

Por lo que respecta al impuesto de Sucesiones y Donaciones, el PP promete que "prácticamente va a desaparecer" mediante la aplicación de bonificaciones. En concreto, las bonificaciones para las sucesiones a favor de hijos, cónyuges y padres serían elevadas al 99% y al 50% en el caso de hermanos.

Las mismas serían aplicadas en el caso de las donaciones, que carecen de bonificaciones en la actualidad. Mediante dichas bonificaciones en Sucesiones y Donaciones, la Generalitat Valenciana dejaría de ingresar 240 millones de euros, según subrayó la formación.

Por lo que respecta al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, la reforma fiscal del PPCV contempla reducir el tipo actual del 10% del tributo en bienes inmuebles al 6% para inmuebles por valor inferior a 250.000 euros. A su vez, al 8% para los de hasta 600.000 euros y al 9% para los superiores a 600.000 euros. "Los bienes muebles pasarán de un tipo general del 6% actual a un 4% con la propuesta del PPCV", explicaron. En materia inmobiliaria, el PPVC también planea anunciar novedades en las próximas semanas.

"En el caso de la vivienda habitual, habrá un tipo superreducido del 3% para viviendas de hasta 150.000 euros para menores de 35 años y de hasta 180.000 para familias numerosas y personas con discapacidad", auguraron en su primera propuesta. Además, este tipo del 3% también se aplicaría en compra-venta de viviendas en municipios pequeños con riesgo de despoblación, según expuso Mazón. La previsión era reducir en 220 millones los ingresos por este impuesto.

Por último, el presidente del PPCV también anunció que en los actos jurídicos documentados (AJD) "se bajará el tipo general de 1,5% al 1% y el tipo de las hipotecas del 2% al 1%". Los ingresos por este tributo menguarían en 120 millones de euros.