El Gobierno valenciano retira la tutela de sus dos hijos a la víctima del exmarido de Mónica Oltra

La Generalitat Valenciana ha asumido finalmente la tutela de los dos hijos de Teresa, la víctima de abusos sexuales por el que fue condenado el exmarido de Mónica Oltra, después de que el pasado mes de enero uno de ellos fuese ingresado tras intoxicarse con cocaína.

La Consejería de Igualdad, responsable de la protección de menores valencianos en situación de desamparo, ha dado el paso tras comprobar que la madre no ha cumplido con los compromisos que asumió en enero para seguir cuidando de los menores. La Generalitat advirtió a Teresa y a su familia que en caso de que incumplieran dichos requisitos se revisaría la intervención por incumplimiento grave y se adoptarían otras medidas, "siempre velando por la protección del menor".

Teresa ha roto la relación que mantenía con el padre de sus niños, un joven que también fue un menor tutelado por la Generalitat. La medida se ha tomado después de que el bebé de Teresa, de apenas seis meses de edad, fuese ingresado de urgencia en enero por consumir cocaína cuando se encontraba al cuidado de su padre.

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Los dos menores ingresarán ahora en un centro de protección y la Administración autonómica se hará cargo de su cuidado, según ha avanzado el diario Las Provincias y ha confirmado EL ESPAÑOL de fuentes conocedoras de la decisión.

Antes de que la líder de Compromís presentara su dimisión el 21 de junio del año pasado, Teresa estaba embarazada de su segundo hijo y el equipo de Mónica Oltra comunicó formalmente a la Fiscalía de Menores de Valencia "una posible situación de desprotección" del hijo mayor, de unos dos años de edad, al comprobar que estaba desatendido.

La situación de la joven de la que abusó Luis Ramírez, exmarido de la dirigente de Compromís, cuando era menor de edad es de extrema vulnerabilidad. Teresa sale adelante con donaciones y gracias al dinero que pide prestado. No tiene ingresos ni trabajo.

El exmarido de Mónica Oltra fue condenado a cinco años de prisión por estos hechos, pero está en libertad a la espera de que el Tribunal Supremo revise el caso y valore si hay que repetir el juicio, tal y como ha pedido su defensa.

Dificultades

La joven afronta desde junio de 2020 las dificultades propias de los menores tutelados que cumplen 18 años y, de pronto, han de valerse por sí mismos.

Casi 17.000 menores viven en España tutelados en centros, que deberían ser un entorno seguro y afectivo para crecer y sanar el daño de las experiencias de desprotección que arrastran. Pero los recientes casos de abusos o explotación sexual de menores tuteladas en varias comunidades ponen en tela de juicio este sistema.

Son niños que han sufrido maltrato por abandono o negligencia en sus cuidados, abusos generalmente del entorno familiar u otras circunstancias que les impiden su pleno desarrollo, por lo que las administraciones se hacen cargo de su tutela mientras se soluciona la situación de riesgo y el menor pueda volver con su familia, si es lo mejor para él.

Algunos de ellos son adolescentes con adicciones o graves problemas de salud mental. En muchos casos, los bebés nacen con distintos tipos de droga en su cuerpo porque las madres han consumido durante el embarazo.