No es no. Al menos de momento. El Comité Federal del PSOE prevé respaldar la decisión de Pedro Sánchez de votar "no" a la primera investidura de Mariano Rajoy, que los populares prevén celebrar a finales de mes. En los últimos días, una mayoría de barones autonómicos han mantenido su rechazo a la candidatura del líder del PP, descartando también una abstención, algo que fuerza a Rajoy a buscar otros apoyos si quiere ser elegido en cuestión de semanas.
El último en decirlo ha sido el propio Pedro Sánchez, desaparecido desde la noche electoral. La líder de los socialistas vascos, Idoia Mendia, se reunió este martes con Sánchez dentro de la ronda con los secretarios generales autonómicos que desembocará en la reunión del Comité Federal del sábado. Mendia, una fiel aliada de Sánchez dentro del partido, explicó la total coincidencia de ambos. El voto del PSOE "será no a la investidura de Rajoy cuando se señale".
"Ahora lo que toca y lo que corresponde no es poner el foco en el PSOE, sino en el PP", explicó Mendia. Es la misma posición que repite sin cesar estos días la Ejecutiva del PSOE y a la que se han sumado otros dirigentes territoriales, entre ellos Susana Díaz, al frente de la influyente federación andaluza.
El PSOE no quiere abrir la puerta este sábado a la abstención porque sabe que Rajoy está deseando ese movimiento para cruzarla a toda velocidad. Según el PSOE, Rajoy debe buscar primero apoyo en sus partidos afines. Es decir, en los partidos de centroderecha como Ciudadanos, Coalición Canaria, el PNV y, si lo desea, en Convergencia Democrática de Cataluña. Si no lo consigue a la primera, la ley prevé hasta dos meses para seguir negociando. Y entonces el PSOE podría cambiar de posición.