La vida y la muerte van de la mano. Un simple gesto puede marcar la balanza en uno u otro sentido. Tratar de paliar los efectos del mayor cementerio de Europa es el objetivo que mueve a diferentes Cuerpos policiales o castrenses en aguas del Mediterráneo. El buque Río Segura, de la Guardia Civil, con 29 efectivos a bordo, es uno de ellos. Y ahora llega a España tras casi tres meses de operación frente a costas italianas en las que han rescatado a cerca de 2.300 personas y ofrecido asistencia médica a más de 1.200.
“La misión principal de los guardias civiles allí desplegados es el auxilio y rescate de los inmigrantes procedentes de África y de los que huyen de países árabes en conflicto, como Siria”, explica la Guardia Civil. Tras ser rescatados, se les traslada hasta puertos como el de Cagliari. Allí, la Benemérita asistió a un hecho poco frecuente: la ovación y el júbilo de aquellos que huyen del horror al levantarse la bandera española, de aquellos que los han salvado de morir en aguas del Mediterráneo. El gesto, al que la Guardia Civil ha definido como "emocionante", ya ha sido compartido en las redes sociales.
En lo que llevamos de año, se ha rescatado a un total de 2.938 personas en 9 rescates, de las que 2.358 lo han sido por personal del buque Río Segura, mientras que otras 580 han sido localizadas por el avión del Servicio Aéreo del Cuerpo. Las dos últimas intervenciones se efectuaron hace unos pocos días, y en ellas se salvó la vida a 344 personas que se encontraban a la deriva en aguas italianas: 262 hombres, 18 mujeres y 64 menores de edad.
El Director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha recibido en la mañana de hoy, en el Puerto de Málaga, a la tripulación del Buque Oceánico de la Guardia Civil Río Segura. “Les doy mis más sinceras felicitaciones”, ha señalado, antes de advertir que esta es una “misión humanitaria muy importante” para España.
Pero no todo han sido celebraciones a bordo del Río Segura. “Hacer el rescate de los niños es lo peor, no nos acostumbramos”, ha revelado el teniente Alfredo Alberto en declaraciones recogidas por La Opinión de Málaga. Una situación que reflejan otras imágenes también distribuidas por la Guardia Civil.