La Fiscalía del Tribunal Supremo ha concluido que no existen indicios suficientes para investigar al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, por las grabaciones de sus conversaciones con el ex director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso. El Ministerio Público considera que el contenido de las grabaciones de ministro del Interior no constituye delito alguno. Eso sí, remite a otras fiscalías -de Madrid y Barcelona- las denuncias contra Daniel de Alfonso para que se investiguen.
La Fiscalía General del Estado acaba de remitir una nota a los medios en que explica las conclusiones a las que ha llegado la Fiscalía del Supremo tras recibir denuncias contra Fernández Díaz y De Alfonso por varios delitos. Los fiscales del Alto Tribunal tenían que decidir solo sobre el titular de Interior, teniendo en cuenta que es el único aforado entre los denunciados por estos hechos que salieron a la luz en plena campaña electoral.
En el caso de Fernández Díaz, el Ministerio Público concluye que "del contenido de las conversaciones no se desprenden indicios suficientes para iniciar una investigación penal por preconstitución falsa de pruebas, por prevaricación administrativa ni por los restantes tipos penales". Y, en el caso de De Alfonso, la Fiscalía del Supremo ha decidido remitir las actuaciones a la Fiscalía Provincial de Madrid y a la Fiscalía Provincial de Barcelona, para que investiguen diferentes delitos de los que se acusa al ya ex jefe de la Oficina Antifraude.
Para el Ministerio Público, el intento del titular de Interior de que desde la OAC se le proporcionar pruebas contra dirigentes catalanes independentistas no supone la comisión de ningún delito. Con esta decisión, se bloquea la opción de que el Supremo investigue a Fernández Díaz.
El ministro no denuncia
Sin embargo, todavía existe la opción de que se presente por parte de algún particular o alguna acusación popular una querella contra el ministro del Ejecutivo de Mariano Rajoy. De esta manera, aunque existiera un informe en contra de la admisión a trámite por parte de la Fiscalía, el alto tribunal tendría que pronunciarse.
La Fiscalía se ha pronunciado sobre el contenido de la grabación y sobre la parte que afecta al ministro. Sin embargo, existe otra línea de investigación, relativa a la autoría de la grabación en sí. La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía (UDEF) y concretamente su comisario, se está encargando de investigar quien pudo grabar la conversación entre el ministro y el jefe de Antifraude -forzado a dimitir tras el escándalo.
En este caso, es la propia Policía la que está analizando si se pudieron poner micrófonos en el despacho del ministro o si, por el contrario, lo grabó alguno de los dos protagonistas de la reunión, o un tercero, conocedor de la reunión.
Por ahora, esta investigación ha quedado en el ámbito interno de la Policía y Fernández Díaz ha optado por no denunciar los hechos en sede judicial.