Susana Díaz pide fortalecer el PSOE en un acto con aroma a precampaña interna

El PSOE nunca ha ganado las elecciones sin unos buenos resultados en Andalucía y en Cataluña, dos comunidades en las que el 26-J cayó en votos y fue superado por el PP por el resto de partidos de izquierda, respectivamente. Pero en Cataluña sí hay socialistas que ganan las elecciones, como Núria Marín, que en las municipales del año pasado convenció al 33% de los electores en Hospitalet de Llobregat, o Núria Parlón, que hizo lo propio con el 40% de los que votaron en Santa Coloma de Gramenet.

Con ellas se dejó ver este viernes Susana Díaz, la presidenta de Andalucía y líder del PSOE regional, otra socialista poco acostumbrada a perder. Hay poquísimas casualidades en la agenda de Díaz, que lleva dos viernes fuera de casa. Si el pasado participó en un acto en Canarias, éste fue la estrella invitada en un seminario organizado por el PSC con el título "Regeneración política: nuevas formas de hacer política".

En Hospitalet, la ciudada catalana más grande en manos de los socialistas (allí viven 250.000 habitantes), Díaz fue arropada por Miquel Iceta, líder del PSC y leal a Pedro Sánchez y Parlón, cercana a la presidenta andaluza y posible candidata al liderazgo del partido hermano del PSOE. También acudieron Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana y fiel aliado de Díaz e Ignacio Urquizu, diputado por Teruel, considerado una de las mentes más preparadas del partido. Carme Chacón, desaparecida de la primera línea tras su misteriosa renuncia a las listas al Congreso, tampoco se perdió el evento. Mientras Díaz se dedicaba al partido en Cataluña, Sánchez seguía prácticamente desaparecido con su segundo acto de la semana, una reunión interna. 

Cataluña, clave en la batalla interna

Cataluña no sólo es clave para las expectativas electorales del PSOE. Lo es también en la batalla interna que probablemente se librará en cuanto se acabe la crisis institucional. El PSOE pospone desde febrero un congreso del partido en el que se renovarán los órganos de dirección y el proyecto.

Díaz ha dicho a sus aliados que Sánchez no puede permanecer ni un minuto más al frente del partido y que ella tiene la intención de presentarse. Pero para ganar necesita convencer a los militantes y no sólo a los barones o dirigentes territoriales más destacados, por lo que no pocos en el PSOE ven estas excursiones de los viernes como el inicio de la precampaña interna. 

"Venimos a aportar, a aprender y a compartir experiencias. Cuando eso pasa, los socialistas salimos siempre fortalecidos", dijo a los medios a su entrada al acto. En su discurso apostó por una "mirada comprensiva" hacia Cataluña y trató de mostrar un perfil más dialogante con la probable intención de reparar su imagen, dañada por sus incesantes críticas al nacionalismo y, en ocasiones, al propio PSC. 

Díaz es consciente de que sólo tendrá posibilidades entre la militancia si se presenta como un líder capaz de coser los rotos del partido y aportar una unidad perdida durante el mandato de Sánchez. Una gira por territorios clave podría ayudarla a vencer en esa batalla y conjurar así las palabras de la alcaldesa de Hospitalet, Núria Marín: "El invierno ha llegado para el proyecto socialista, y solamente si trabajamos conjuntamente saldremos".