La corrupción agrieta la relación de Rivera con Rajoy: “Estamos en posiciones antagónicas”
- Ciudadanos pide “tranquilidad” al PP y dice que su actitud “devalúa las instituciones”.
Noticias relacionadas
- Aznar bendice a Rivera como alternativa “moderada, centrista y liberal”
- PSOE, Podemos y Ciudadanos llevan a rastras al PP a la comisión de la corrupción
- Rajoy comparecerá el último y Bárcenas el primero en la comisión sobre la corrupción del PP
- Bárcenas culmina su nuevo viraje tildando de "despropósito" que Rajoy declare en el juicio
La lucha contra la corrupción ha tensado esta semana la relación de Ciudadanos con el PP. Las críticas del vicesecratario de Organización Fernando Martínez Maillo al plan de trabajo de la comisión Bárcenas acordado por la oposición han generado una mezcla de preocupación y decepción en el partido naranja. Albert Rivera y su equipo no entienden los “numeritos” y las “palabras gruesas” de los portavoces populares, más propios, dicen, del espectáculo habitual de Podemos. Y aseguran que la actitud del PP “devalúa las instituciones”.
“Es evidente que Ciudadanos y PP estamos en posiciones antagónicas a la hora de combatir la corrupción”, dicen fuentes de Ciudadanos. “Cada vez que hay que aplicar los puntos del pacto en materia lucha contra la corrupción no han hecho otra cosa que mostrarse como víctimas, a pesar de los numerosos casos que tienen en su mochila”.
No es la primera vez que Ciudadanos y PP chocan cuando se sientan a hablar de regeneración democrática. Rivera está relativamente satisfecho con el funcionamiento del pacto de investidura en lo que se refiere a medidas económicas. La sensación en el grupo naranja es que el PP cumple. Sin embargo, cada vez que sale la corrupción saltan chispas.
Murcia y Bárcenas
Ocurrió en el largo serial de Murcia, que culminó con la dimisión de Pedro Antonio Sánchez. Y está pasando ahora en la comisión parlamentaria sobre la presunta financiación irregular del PP. Ciudadanos incluyó esta comisión en los seis compromisos que obligó a firmar a Mariano Rajoy como condición previa al acuerdo de investidura. Pero cuando quiso ponerla en marcha, el PP incumplió su palabra. Rivera se apoyó entonces tanto en PSOE como en Podemos para impulsarla.
Los tres partidos de los oposición han acordado esta semana un extenso plan de trabajo, que incluye la citación de tres generaciones de dirigentes del PP, algunos de ellos encarcelados. El ex tesorero Luis Bárcenas abrirá la comisión el 26 de junio. El último compareciente será el presidente del Gobierno.
Maillo montó en cólera, acusó a Ciudadanos de escorarse a la radicalidad, amenazó con llevar la comisión - que ellos mismos respaldaron con su voto favorable - al Tribunal Constitucional y dejó entrever que aprovechará su mayoría absoluta en el Senado para cuestionar la financiación del resto de partidos.
En Ciudadanos no comprenden este nerviosismo y confían en que el PP se “tranquilice y se calme” en los próximos días. “Ciudadanos seguirá siendo radical en su lucha contra la corrupción y esperamos que el PP deje de defender lo indefendible”, señalan estas mismas fuentes. “El Parlamento debe de hacer su trabajo”.
Cs no va a aflojar
Rivera ha dado orden a los suyos de no aflojar. No sólo es una bandera, la de la regeneración institucional, que quiere enarbolar, sino que además Ciudadanos recuerda que la preocupación de los españoles por la corrupción se ha disparado 12 puntos en un mes, según recoge el último barómetro del CIS. “Tenemos que trabajar para que los ciudadanos vuelvan a confiar en sus representantes públicos”, dicen.
Rajoy pidió a Rivera que dejase de “dar la lata” en una reciente sesión de control al Gobierno. El líder de Ciudadanos piensa justo lo contrario y asegura que su grupo realizará en la comisión Bárcenas el mismo trabajo “serio y riguroso” que está haciendo ya en otras comisiones de investigación. “Seguiremos exigiendo que se luche contra esta lacra que ha supuesto un auténtico saqueo de fondos públicos para el enriquecimiento personal o para, presuntamente, financiar el partido de forma ilegal”, aseguran desde el entorno de Rivera.
Ciudadanos cree que la comisión debe servir para depurar responsabilidades políticas. Y ha pedido que se circunscriba al período 2003-2017, que coincide con el mandato de Rajoy al frente del PP. “Esperamos que el PP deje de poner palos en las ruedas ya que es necesario investigar y, en su caso, depurar las responsabilidades políticas que puedan surgir de las distintas comparecencias”, dicen. “A pesar de la actitud obstruccionista de los conservadores, seguiremos exigiendo que se cumplan los acuerdos alcanzados para acabar con los corruptos a los que durante tantos años se ha protegido desde los viejos partidos”.