Iglesias disculpa a Torra por Eslovenia: “Ninguno estamos libres de que se nos caliente la boca”

Pablo Iglesias ha dejado Cataluña para el final de su discurso. Antes ha bebido agua, ha hablado de los chalecos amarillos, del Brexit e incluso de Gibraltar. Aunque, al mirar, por fin, hacia la Generalitat, ha reconocido: “Es lo que más interesa a esta Cámara”.

Le ha precedido en la tribuna Pablo Casado, que ha recriminado a Pedro Sánchez el “derramamiento de sangre” que propone “el socio que le sostiene”: Quim Torra. Sobre la vía eslovena y los más de sesenta muertos que dejó aquella guerra, el líder de Podemos ha diagnosticado: “Dijo algo que no piensa, se le calentó la boca. Ninguno estamos libres de ello”.

Iglesias, moderado y sin levantar la voz en todo su discurso, ha atribuido el arrebato del presidente catalán a dos circunstancias: un estilo “marcado por Twitter” y la “necesidad de ser más radical que aquellos que intentan condicionar su estrategia” –en clara referencia a Esquerra Republicana–. Con esa intención de normalizar el espejo esloveno elegido por Torra, el secretario general de Podemos también ha recordado un mensaje en redes sociales de Gabriel Rufián: “155 monedas de plata”.

“Ningún independentista quiere una guerra en Cataluña”, ha zanjado Iglesias. Aunque sin mentarlo expresamente, el secretario general morado ha recurrido con frecuencia a la “conllevancia” que proclamó Ortega y Gasset: “Debemos asumir la crisis territorial con naturalidad. La realidad es la que es. Siempre ha estado presente. Afrontémosla con espíritu constructivo”.

"El Estado Autonómico está agotado y lleno de defectos"

Para testar la “complejidad” de Cataluña, Iglesias ha reseñado que Ciudadanos –“un partido que pretende el fin de las Comunidades autónomas"– fue el partido más votado, que Podemos logró otro tanto en un par de elecciones generales y que los independentistas, al mismo tiempo, “gobiernan legítimamente”. A partir de ahí, ha desgranado el ya tradicional mensaje de la organización de los círculos: España como “realidad plurinacional”. A ojos de Iglesias, que apuesta por un mayor autogobierno de las regiones, “el Estado Autonómico seguramente está agotado y lleno de defectos”.

Dicho esto, ha empleado unos minutos en criticar a PP, Ciudadanos y Vox -a los que mete en un mismo saco-: "Echo de menos una derecha responsable, con altura de Estado". Aquí una frase que ha sorprendido a los propios diputados populares: "Ojalá el PP sonara más a Ana Pastor y menos a José María Aznar".

Iglesias también ha llamado a la intriga: "Muchos -en referencia a quienes en público defienden la prisión para los líderes separatistas catalanes- me reconocen en privado que mantenerlos encarcelados es una barbaridad. Ojalá se atrevan a decirlo en público".