Maduro no descarta una guerra civil en Venezuela: "El pueblo ya se está armando"

Nicolás Maduro no descarta una guerra civil en Venezuela. Así se desprende de la entrevista que el presidente de Venezuela mantuvo este viernes con Jordi Évole, emitida este domingo por la noche. "El pueblo se está armando ya", amenazó el gobernante latinoamericano con la vista puesta en Europa y Estados Unidos.

"Tenemos la experiencia de veinte años de lucha", contestó Maduro cuando fue preguntado expresamente por la posibilidad de que la crisis institucional desemboque en un conflicto fratricida. "Para bien o para mal, yo asumo toda mi responsabilidad", aseveró impasible.

El presidente venezolano culpó a Estados Unidos y a la Unión Europea de lo que pueda pasar: "Todo depende del nivel de locura y de agresividad del imperio del norte y de sus aliados de Occidente. Pedimos que nadie intervenga en los asuntos internos y nos preparamos para defender a nuestro país".

De hecho, acusó a Pedro Sánchez de haberse plegado a la política de de Trump. "Ese será uno de los errores que le hagan perder el poder", llegó a decir. "Está repitiendo lo de Aznar, y ¡no ganará ni un voto por la derecha", apuntó el regidor chavista sugiriendo un beneficio para Podemos, "y perderá muchos por la izquierda".

"Ojalá no te manches las manos de sangre junto a Trump en la crisis de Venezuela", le ha llegado a espetar hablando a cámara al presidente español. "Te va a ir peor que a Aznar cuando se metió en Irak".

"Son milicianos populares"

Maduro concibe como algo cotidiano que el "pueblo" se arme: "Se organiza como miliciano en su barrio, en su fábrica, en la universidad... En los distintos espacios. Son cuerpos de combatientes".

Cuando Évole mostró su sorpresa, el líder caribeño insistió: "Tienen acceso al sistema de armas de las Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas. Tienen entrenamiento militar". Y añadió, incluso: "Si somos atacados, todos saben qué hacer".

Nicolas Maduro y Jordi Évole en el Palacio de Miraflores. E.E.

En cualquier caso, Maduro trató insistentemente de desvincular cualquier posible conflicto armado de su régimen. Lo atribuyó constantemente a la hipotética intervención de Estados Unidos y Europa. Ellos, arguyó, sólo se defienden: "El pueblo se arma desde un punto de vista institucional, constitucional. La opción militar está sobre la mesa de Donald Trump. ¿Qué debe hacer un país? ¿Rendirse? Si quieres la paz, prepárate para defenderla".

El diagnóstico que trazó Maduro en relación al "ring" es el siguiente: "Nuestros oponentes son poderosos. Dan golpes sucios. No pelean respetando las reglas del juego, pero nosotros nos defendemos. Como David contra Goliat. Tenemos nuestros secretos".

En un momento determinado, Maduro quiso dirigirse directamente al presidente de Estados Unidos: "¡Para! ¡Para, Donald Trump! ¡Estás cometiendo errores que van a mancharte de sangre las manos! Ellos quieren volver a un siglo XX de golpes de Estado militares, de gobiernos títeres subordinados a sus mandos y de saqueo de nuestros recursos naturales".

Sobre Iglesias y los periodistas detenidos

Nicolás Maduro reaccionó con virulencia a un corte de Pablo Iglesias diciendo que "en Venezuela la situación política y social es nefasta", como admitió por primera vez en el Senado hace algo más de un mes. "Es su opinión, pero que se dedique a unir a su partido", se mofó, ante la crisis de Podemos. "Es que en España todos se creen ya que meterse con Venezuela es ganar votos... y es al revés".

, tal y como ha hecho en multitud de ocasiones, volvió a mofarse de la condición de presidente "no electo" de Sánchez: "Te hundirás". Si alguien debe convocar elecciones, reiteró Maduro, es el presidente del Gobierno español: "Es lo que pienso de manera automática y creo que lo piensa todo el pueblo. Le va a ir muy mal en las elecciones que convoque".

Aunque no descarta tajantemente ser él quien llame a las urnas, Maduro se refirió a las últimas presidencias y hizo caso omiso al ultimátum de la Unión Europea: "Los bolivarianos no nos rendimos. Luchamos hasta con las uñas".

Sobre los periodistas detenidos, Maduro negó la mayor. Lo llamó "chequeo" y lo enmarcó dentro de la normalidad. "¿Veinticuatro horas de chequeo?", le preguntó Évole. A lo que él respondió: "Montajes que hacen, son provocaciones. Hacen montajes para presentar una noticia y después la reproducen por Twitter, por las redes sociales. En Venezuela hay pleno ejercicio de la libertad".

La diáspora por hambre

Maduro sabe que de su país han huido cientos de miles de venezolanos, hasta tres millones según Naciones Unidas, pero él reconoce "unos 800.000". Es más, dice que "miles están regresando por el Plana Vuelve a la Patria, al darse cuenta de que en esos países la realidad es pastosa, neoliberal".

Para el tirano chavista la mayoría se fueron "engañados con una esperanza, con una falsa visión... o con desesperación". Y tras ver testimonios de compatriotas reclamando "ayuda humanitaria" y criticando que en su país "no hay vida", su respuesta es que "lo que apena es que haya venezolanos que digan cosas que saben que no son verdad".