TVE ha entrevistado a Arnaldo Otegi. El coordinador general de EH Bildu anunció este lunes su presencia en 'La noche en 24 horas' y durante todo el martes y hasta el momento en el que ha aparecido en pantalla, el debate fue intenso. Frente a los defensores de la decisión de la cadena pública y sus profesionales, sobresalieron las posturas de la AVT, que pidió al ente "reconsiderar" la emisión; del PP, que llamó al "apagón" para que el espacio fuera un fracaso en audiencia; o de Ciudadanos, que reclamó la dimisión de Rosa María Mateo, administradora provisional de RTVE. Vox lo llegó a calificar de "atentado".
La ocasión le ha llegado en plena negociación para la investidura de Pedro Sánchez -sin más apoyos, dos meses después de las generales, que sus 123 diputados en el Congreso-, que podría necesitar de los abertzales. Y Otegi, que se estrenaba en el prime time de la televisión 'de todos' -eso sí, en el 24 Horas, que ronda el 1% de share-, no ha perdido la ocasión de lanzar los mensajes que pretendía: "Agradezco esta oportunidad. Ha habido múltiples presiones para que esta entrevista no se realizara", ha comenzado. "Se habla del pasado como un intento permanente de bloquear el presente y el futuro".
El presentador, Marc Sala, ha hecho 'la pregunta' nada más comenzar: ¿condena el terrorismo de ETA y sus asesinatos? El periodista ha pedido "un sí o un no" que no le ha concedido su interlocutor. "Hemos hecho una cosa más importante que condenar la violencia armada: hemos contribuido a que desaparezca la violencia política en este país". Preguntado por las víctimas, Otegi ha tratado de corregir a Sala con su "habrá que hablar de todas las víctimas" -más tarde ha apuntado que "la tortura es un delito de lesa humanidad"- y ha recordado que ya pidió perdón en un libro en el que se puede leer "lo siento de corazón". Dicho esto, ha instado al "Estado español" a "asumir responsabilidades" por lo que ha llamado "una estrategia que ha causado múltiple dolor".
"No bloqueo, no cheques en blanco"
Ya en materia estrictamente política, más en concreto sobre la investidura, Otegi ha afirmado que "nadie" se ha puesto en contacto con ellos por el momento, sí con sus socios de ERC. "No vamos a permitir el acceso de la extrema derecha al Gobierno del Estado español. Lo que rige nuestra posición es 'no bloqueo, no cheques en blanco'". De sus palabras se extrae que Cataluña y las propuestas del PSOE en torno a los presos preventivos por el referéndum ilegal del 1-O tendrán bastante que ver para el respaldo a Sánchez.
Sobre el PP, ha recalcado que Bildu "ha alcanzado acuerdos con el señor Javier Maroto en Vitoria" y ha amenazado a los 'populares', a los que ha visto "alterados" con la entrevista: "No voy a tener inconveniente en hacer públicas las actas de mis negociaciones con ellos, hay mucha hipocresía".
Ya en la ronda de preguntas de los colaboradores, Otegi, a sus 61 años, ha considerado que su tiempo político -está inhabilitado para ejercer cargo público hasta 2021- concluirá cuando le "retire la gente, no cuando lo digan los medios de comunicación u otros partidos". Sobre si la no condena de los crímenes de ETA es una "justificación", el entrevistado ha vuelto a revolverse y dirigido la respuesta a su camino: "No puedo hacer debates sobre palabras. El hecho incontrovertible es que en este país ha desaparecido la lucha armada y que hemos hecho un trabajo ímprobo para que esto ocurra". Y, colocando a Miguel Ángel Revilla en el centro, ha zanjado: "Y no lo digo yo, que lo dice incluso el presidente de Cantabria".
Sala, que no ha dejado ninguna cuestión espinosa por plantear, ha querido dedicar uno de los 40 minutos que ha durado la entrevista a exponer las razones por las que el programa y el Consejo de Informativos de TVE la vieron pertinente: "Por aquí han pasado absolutamente todos los partidos con representación parlamentaria. Estamos comprometidos con el pluralismo. Para nosotros, periodismo es preguntar y escuchar a todos". Otegi, que no ha viajado a Madrid y ha intervenido desde el País Vasco, ha dedicado algo menos, unos segundos, a contar una "anécdota": "Yo veía este programa todas las noches en la cárcel, se me hace familiar".