Ana Beltrán y Pablo Casado durante una visita a los Sanfermines.

Ana Beltrán y Pablo Casado durante una visita a los Sanfermines. Pablo Lasaosa

Política NUEVA DIRECCIÓN DEL PP

"La Beltrán", una política implacable que Casado elige como nº 3 para poner orden en el PP

Ana Beltrán, presidenta del PPN y curtida en la lucha contra el nacionalismo, ha sido la opción del presidente para controlar el partido.

31 julio, 2019 03:15

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Con cierta timidez y una modesta sonrisa, Ana Beltrán, la flamante vicesecretaria de Organización del Partido Popular, ponía un pie en la sala de prensa de la sede nacional de la formación. Hacía pocos minutos que se había conocido su nombramiento y ella, presidenta del PP navarro, diputada electa por Madrid, era una constante en las quinielas. Sin embargo, cuando se oficializó, ella apareció casi con sorpresa, dejando los focos y el primer plano para otros de sus compañeros.

Ana Beltrán Villalba (Zaragoza, 1966), empresaria de profesión, líder de los populares en la Comunidad Foral de Navarra y una mujer “muy directa, de las que no tienen dobladillo”, según apuntan quienes la conocen a este periódico, es la elección de Pablo Casado para sustituir a Javier Maroto como número 3 del partido. El cargo, en el que tendrá que poner orden en las delegaciones del partido, le viene al pelo, dada su fama de política dura, firme, contundente.

Beltrán se afilió al Partido Popular en 2008, tras la refundación de la formación en Navarra tras la ruptura del tradicional pacto que mantenían con UPN para ir integrados en sus filas. La hoy vicesecretaria de Organización, casada con un pamplonés hijo de un histórico cargo del partido foralista y con cuatro hijos, dirigía por entonces una bodega familiar —Camilo de Castilla— en el municipio navarro de Corella. “Ella aparece desde el primer momento en la historia del PP navarro. Fue de las primeras en unirse”, cuentan fuentes populares de la región.

“Contaba con un perfil prestigioso”, relatan desde Navarra: la habían nombrado recientemente Empresaria del Año y “tenía una capacidad, proyección y perfil regenerador al no haber hecho carrera interna en la política” que casaba con el mensaje que el nuevo partido trataba de dar. En las primeras elecciones a las que concurrió fue como número 2 y los populares obtuvieron cuatro escaños en el Parlamento Foral. Beltrán fue la portavoz la mayor parte de la legislatura.

Ana Beltrán, segunda por la derecha en primera fila, en la imagen oficial del nuevo Comité Ejecutivo del PP.

Ana Beltrán, segunda por la derecha en primera fila, en la imagen oficial del nuevo Comité Ejecutivo del PP.

Ana Beltrán es una mujer “con arrojo”, afirman políticos navarros en privado. Tanto que decidió dedicarse por completo a la política en 2012 y se planteó optar a la presidencia del PPN. “El aparato se hizo con el poder y se pactó una candidatura única presidida por Enrique Martín”, comentan históricos del PP. Martín contaba con el favor de Génova y de cargos como María Dolores de Cospedal, Juan Carlos Vera o Carlos Floriano. Finalmente, ella fue designada vicepresidenta, pero al tiempo, “en cuanto hubo un Congreso, fue elegida presidenta del PPN”.

Sin embargo, en aquellas elecciones regionales de 2015, los populares navarros perdieron la mitad de sus escaños: pasaron de cuatro a dos. “Fue un poco chasco pero Ana tuvo la virtud de hacer una gran labor con poco equipo. Le tomó la delantera en cuanto a coraje político y argumental a UPN”, opinan las fuentes.

En esa época, sus detractores empezaron a llamarla “la Beltrán”, en un intento de ridiculizar su ímpetu parlamentario. “Daba guerra todo el tiempo y tuvo algunas intervenciones memorables”. Fuentes de UPN comentan que se caracteriza por su “beligerancia”. “Es muy dura contra el nacionalismo. Ha hecho discursos contra Uxue Barkos (Geroa Bai) y contra María José Beaumont (Bildu) en los que le ha dado mucha caña”, una apuesta que desde el PP nacional se está reforzando en los últimos tiempos.

Apuesta contra el nacionalismo

Beltrán fue uno de los principales apoyos de Pablo Casado en el proceso de primarias No extrañó en Navarra su paso a la política nacional. “Aunque no es una intelectual, tiene muchísimo coraje. Tenía conexión con Casado, se notaba que compartían identidad y visión política”, comentan desde el PPN.

Así, primero fue de la mano del nuevo presidente del PP en las listas al Congreso de los Diputados por Madrid, de cinco. Ahora, como fontanera de cabecera del líder a nivel orgánico.

Otras voces, en privado, tampoco se han mostrado sorprendidos de la elección del presidente del PP para sustituir a Javier Maroto, ni siquiera su salto a Madrid. “Ana se quedaba sin espacio en Navarra de alguna manera. Lo primero que se habló para ella fue Europa, pero ella no quería, se veía mucho más en el Congreso que en el Parlamento Europeo”. “Vio las posibilidades que tenía en Madrid y ahora han cristalizado”.

El diputado Sergio Sayas, de UPN pero que concurrió al Congreso a través de la coalición Navarra Suma, considera a preguntas de este diario que el nombramiento de Ana Beltrán responde a que Pablo Casado “ha valorado la especial circunstancia por la que está pasando Navarra en este momento. Ana ha luchado contra el nacionalismo y esto es un respaldo por parte del PP”.