Cuando las cámaras no enfocan y se apagan las luces, el presidente en funciones, Pedro Sánchez, deja atrás la sonrisa con la que únicamente responde a los periodistas. En las reuniones que está manteniendo con colectivos sociales en las últimas jornadas, los asistentes se encuentran con un líder del Ejecutivo sin pelos en la lengua, que no duda en verter sus opiniones.
“No me asustan las elecciones”, comentó en esta ocasión Sánchez, según confirman diversas fuentes consultadas por este diario, todas ellas presentes en la cita celebrada este miércoles con colectivos de diversidad. Allí, los asistentes vieron a un presidente en funciones con “entusiasmo, energía, ganas de seguir adelante”.
Así, siempre según el relato de los invitados, el socialista indicó que Podemos vive “una situación muy delicada”, y que, por eso, “la cosa está al 50%. Puede haber gobierno o elecciones”.
"La gente quiere un gobierno de izquierdas"
Sánchez se dirigió a los miembros de las asociaciones —que incluían desde los pensionistas a activistas gitanos, pasando por representantes de diferentes minorías étnicas— dejando claro que no desea que haya una repetición de las elecciones generales. Su plan pasa por formar un gobierno netamente socialista, que incluya independientes pero que sean “del partido, comprometidas con un gobierno de progreso”. “No me fío de Podemos”, repitió, en sintonía con lo mostrado en otras citas de la misma naturaleza.
Las fuentes consultadas también ponen otra expresión en boca del secretario general socialista: “La gente quiere un gobierno de izquierdas. Y eso será así o antes o después”.
El presidente en funciones no atendió a la prensa ni a su llegada ni a su salida, pero sí que les dedicó un discurso a los representantes de los colectivos, tras las intervenciones de Mónica Silvana, secretaria de Movimientos Sociales y Diversidad del PSOE, y de Carmen Calvo, ministra en funciones de Igualdad y vicepresidenta del Gobierno. Escuchó a la treintena de invitados uno a uno y finalizó el encuentro asegurando que había “aprendido mucho”.
"La moral está alta"
“La moral está alta”, confirmó durante su alocución Pedro Sánchez. Y el poso que dejó en los asistentes fue unánime: “Está dispuestísimo a lo que sea necesario. También nos ha confirmado que tiene en la agenda interlocuciones inminentes con los tres grandes partidos. Nos ha dejado claro que no teme a las elecciones”, relata una de las representantes de las asociaciones. “La situación está pendiente del socio preferente, pero las elecciones no le asustan”.
La confianza del líder es tal que los colectivos le han arrancado la promesa de avanzar en el conflicto de las pensiones, en mejorar la Ley de igualdad de trato y no discriminación y retomar la negociación respecto a la actualización de la Ley de Asociaciones, en caso de conseguir una investidura. “Quiere reconocer el trabajo que hacemos y reforzarnos”, cuenta una asistente.
A lo largo de esta semana, Sánchez se reúne con distintas asociaciones para “escuchar propuestas e incorporarlas a su programa”. Un gesto con el que pretende ganar la batalla del relato a Podemos y enviar a Iglesias una “oferta programática difícil de rechazar”.