La reunión entre Inés Arrimadas y Pedro Sánchez no ha arrojado ninguna herramienta para el desbloqueo. La portavoz de Ciudadanos ha exigido al presidente del Gobierno que rompa su acuerdo con Podemos y selle un "gran pacto constitucionalista entre PSOE-PP-Cs". Un ruego que el socialista no ha atendido. Según la diputada por Barcelona, el líder del PSOE le ha transmitido que no se plantea romper con Pablo Iglesias.
"Le he pedido que haga Historia... para bien. Coincido con el Sánchez de hace varias semanas. Un Gobierno con Podemos y los nacionalistas no dejaría dormir al 95% de los españoles", ha ironizado Arrimadas en la rueda de prensa posterior. "¿Os imagináis que el vicepresidente asumiera que hay presos políticos?", ha incidido la líder naranja.
Arrimadas, no obstante, ha aclarado que tampoco votará a favor de Sánchez si rompe con los nacionalistas. En más de una ocasión, la dirección de Ciudadanos ha insistido en la "incompatibilidad" de Podemos con el "ADN liberal".
A pesar de lo infructuoso del encuentro, Arrimadas se muestra ligeramente optimista. Ha asegurado que la vía del "acuerdo constitucionalista sigue abierta" porque Sánchez "no tiene, de momento, otros apoyos".
Arrimadas ha presumido de que "el grueso de la reunión" ha versado sobre la propuesta de Ciudadanos. Con el objetivo de "sentar las bases" de ese posible acuerdo, le ha entregado un documento con los cuatro puntos que ensamblarían el pacto.
Los naranjas han marcado a Sánchez cuatro condiciones. Todas ellas mucho más factibles que las que puso Rivera sobre la mesa -el expresidente liberal llegó a pedir que se disolviera el gobierno de Navarra-.
Las cuatro condiciones
Primero: "Los pactos de Estado durante la legislatura tendrán que ser entre partidos constitucionalistas".
Segundo: "Un pacto nacional por la Educación".
Tercero: "No subir los impuestos a la clase trabajadora".
Cuarto: "Una reforma electoral que establezca un corte del 3% o 4% del voto nacional para entrar en el Congreso".
"Tenemos la obligación moral de buscar este acuerdo hasta el final. Haré todo lo que esté en mi mano", ha comentado Arrimadas tras ver al presidente Sánchez. Un mensaje similar al que viene transmitiendo desde que tomó las riendas -de facto- de la formación.
Pablo Casado, en una rueda de prensa previa, ha rechazado de nuevo la vía Arrimadas y ha emplazado a Ciudadanos a apoyar a Sánchez si éste rompe con ERC. "Sumaría más síes que noes con Arrimadas, formaciones regionalistas y el voto de un diputado de Navarra Suma", ha trasladado el líder conservador.
Un extremo que Arrimadas no contempla y que así se lo ha hecho saber a Pedro Sánchez. De momento, mientras Casado reitere su "no" al pacto a tres, no hay "pacto constitucionalista" posible. No obstante, ella está "convencida" de que si el PSOE se abre, "Casado se verá obligado a sentarse a la mesa".