La conversación de Pedro Sánchez y el rey Felipe VI tras jurar el primero su cargo como presidente del Gobierno ha sido la protagonista de la toma de posesión del líder socialista. "Ocho meses para diez segundos", ha bromeado Sánchez, a lo que el Rey ha contestado: "Ha sido rápido, simple y sin dolor. El dolor viene después".
Sánchez ha jurado ante el rey en el Palacio de la Zarzuela, en un acto que ha vivido por segunda vez y en el que, al igual que en la primera ocasión, lo ha hecho ante la Constitución y sin presencia de la Biblia y el crucifijo.
Las palabras las han podido escuchar los periodistas que cubrían la ceremonia, con las que Sánchez se ha referido a la breve duración del acto de la promesa frente a los ocho meses transcurridos desde las elecciones generales del 28 de abril.
El comentario ha sido acogido con risas por parte del presidente del Gobierno, quien ha reconocido ante Felipe VI: "Le hemos dado muchas preocupaciones". Sánchez también ha comentado al jefe del Estado que le veía "más delgado".
El Salón de Audiencias del palacio ha acogido este breve acto, en el que Sánchez ha adquirido la condición de jefe del Ejecutivo para liderar el primer gobierno de coalición de la democracia, entre PSOE y Unidas Podemos, tras haber obtenido el martes, la confianza del Congreso con 167 votos a favor, 165 en contra y 18 abstenciones, entre ellas, las de ERC y EH Bildu. Con este panorama a Sánchez le espera una legislatura complicada, a la que se ha referido el Rey hablando de "dolor".
Ante las principales autoridades del Estado y tras la lectura del real decreto rubricado por el rey con el nombramiento de Sánchez y publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE), Sánchez ha procedido a leer el texto de la promesa con su mano derecha apoyada en la Constitución:
"Prometo, por mi conciencia y honor, cumplir fielmente con las obligaciones del cargo de presidente del Gobierno, con lealtad al rey, y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros", ha recitado Sánchez.
El ejemplar de la carta magna ha estado abierto por el artículo 99, en el que se recogen, entre otros preceptos, la facultad del rey para consultar a los partidos y proponer un candidato a la presidencia del Gobierno y el procedimiento para lograr la investidura.