La Ley de la Eutanasia volverá este martes al Congreso de los Diputados por tercera vez tras decaer en las dos legislaturas pasadas. Y su aprobación para despenalizarla está más cerca que nunca. El Pleno del Congreso dará luz verde a tramitar esta ley, que será la primera de la legislatura, y que cuenta con una mayoría parlamentaria suficiente para salir adelante.
El texto ha sido propuesto por el Grupo Parlamentario Socialista para dar una "respuesta jurídica, sistemática, equilibrada y garantista a una demanda sostenida de la sociedad actual como es la eutanasia". Con esta ley, apuntan, se busca legislar para "respetar la autonomía y la voluntad de poner fin a la vida" de aquellos que están en una "situación grave, crónica e invalidante" de aquellos que padecen "un sufrimiento insoportable que no puede ser aliviado en condiciones que considere aceptables".
Los socialistas abogan por incluir esta práctica como una prestación más en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud y regular la labor de los médicos ante estos casos, permitiendo que los profesionales que así lo deseen puedan apelar a la objeción de conciencia para no realizar esta práctica.
En el texto que se debatirá en la Cámara también pone de relieve que esta ley no solo "regula y despenaliza" la eutanasia, sino que además da las "garantías suficientes" para salvaguardar la "absoluta libertad de decisión" impidiendo cualquier tipo de "presión externa"
PP y Vox votarán en contra, Cs a favor
Sánchez contará en principio con el apoyo de los que facilitaron su investidura, por lo que su tramitación está casi asegurada. Abiertos a hacerlo están los 10 diputados de Ciudadanos, que presenta también su proposición de ley de muerte digna, "compatible" con la que presentará el PSOE. Lo que sí es seguro es que Partido Popular y Vox votarán en contra.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hizo bandera de esta ley en las campañas electorales de abril y de noviembre. Su tramitación decayó en dos ocasiones por la convocatoria de elecciones. Fue en junio de 2018 cuando una norma sobre la eutanasia logró por primera vez un apoyo mayoritario para su tramitación y fue gracias a un cambio en la postura de Ciudadanos que pasó del voto en contra en un primer debate -sobre una ley de Unidas Podemos- a la abstención en la norma socialista.
La segunda toma en consideración tuvo lugar en septiembre de 2019, poco antes de que se volvieran a disolver las Cortes por la incapacidad de Pedro Sánchez de formar Gobierno. Tanto el año pasado como el anterior el PP votó en contra de su tramitación. Ahora, con un arco parlamentario distinto al de aquellas legislaturas, el PSOE volverá a intentar sacar adelante esta ley.
Defensa de la Sanidad Pública ven "urgente" su aprobación
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública celebra la propuesta de regulación de la eutanasia y ha pedido que su aprobación sea "urgente".
En un comunicado considera que "es una cuestión moral y de ámbito privado", por lo que creen que "no parece razonable imponer a los demás las propias creencias en el marco de las decisiones individuales que solo le afectan a uno mismo". "Una vez más, conviene recordar que reconocer un derecho no obliga a ejercerlo, sino que facilita su uso por quien libremente lo desee", han reivindicado.