Hay que tomar precauciones, pero intentar mantener las rutinas diarias. Es por eso que la amenaza del coronavirus no ha comportado la adopción de medidas drásticas como puede ser el cierre de estadios de fútbol o la cancelación de grandes concentraciones en un mismo espacio.
La marcha del 8-M se podrá celebrar con normalidad, ha indicado el Ministerio de Sanidad, que también ha aconsejado evitar participar en el caso de que se tenga tos u otros problemas respiratorios.
Esta cita anual puede ser una ocasión para el contagio, han advertido desde algunos sectores, y en la medida de lo que sea posible se pide a la ciudadanía evitar el contacto físico y cumplir con algunas sugerencias como son la de no tocarse el rostro con las manos o no asistir ante la aparición de cualquier síntoma vinculado con el virus.
La manifestación del Día de la Mujer ha concentrado en las pasadas ediciones a muchas más mujeres que hombres en las principales ciudades del país. Una de las más numerosas fue la del 2018 en Madrid, con 600.000 personas, según los organizadores.
Nadie duda de que la amenaza del virus puede afectar a la asistencia de este año, pero son precisamente las mujeres las que están siendo, a escala mundial, las menos afectadas por el virus. Hay dos investigaciones que avalan estas conclusiones.
Menos afectadas
El centro chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CCDC) publicó las cifras de la afectación del virus en función del sexo del infectado en más de 72.000 pacientes.
De este registro de casos, el 51% eran hombres. Pero la diferencia principal estaba en que de los varones infectados, el 2,8% no superó la enfermedad frente a un proporción mucho menor en el caso femenino: sólo el 1,7% había fallecido.
El otro estudio, de autoría estadounidense, se publicó en la revista científica Lancet. A partir de 99 casos registrados (67 hombres y 32 mujeres), los datos arrojaban que las probabilidades de infección y de deceso aumentaban en hombres que superaban los 50 años y con patologías previas. Y que las mujeres, por contra, estaban menos expuestas.
Las primeras conclusiones reflejan que la biología femenina presenta una mayor resistencia frente a este patógeno, como también se ha observado en el caso de menores de edad.
Estrógenos
Una de las razones de esta diferencia puede estar vinculada con las hormonas femeninas, como es el caso de los estrógenos.
La doctora Sabra Klein, del departamento de Microbiología Molecular e Inmunología de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos, afirmaba en la BBC que hay “estudios de ratones infectados con el anterior brote de coronavirus del SARS que probaron que el estrógeno definitivamente ayudó a que los ratones hembras controlaran la infección mejor que los machos”.
Sin embargo, tampoco se excluyen razones culturales, como que en China los hombres fuman más que las mujeres (un 50% respecto a un 2%). El tabaco sería un factor de riesgo, así como las enfermedades respiratorias.