El presidente del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, Jaume Padrós, ha criticado que la Comunidad de Madrid ofrezca contratos a médicos catalanes que están haciendo la especialización del MIR porque, a su juicio, los “necesitan” en otros "lugares del Estado".
Esta crítica, hecha a través de las redes sociales, no ha sido la única. Este lunes en una entrevista en TV3 acusaba al Estado de “entorpecer” la distribución de equipos de protección individual -mascarillas- a los médicos y enfermeras de Cataluña.
"Es obvio que, desde la trinchera, hemos visto que en el caso de Cataluña la ralentización del suministro de material se ha entorpecido con el decreto", afirmó en relación a la aplicación del estado de alarma del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Por lo que respecta a la gestión realizada por el Gobierno de la Generalitat con el foco del virus en Igualada o la opacidad sobre la balance de muertos en los hospitales catalanes, entre otros, el galeno catalán no emitió ningún juicio.
Consultado por este medio, asegura que "transmitió su crítica al ministro de Sanidad" respecto al reclutamiento de jóvenes médicos y que esté le ha dado la razón. "Es una polémica resuelta", añade.
Por lo que respecta a la falta de equipos de protección individual para sanitarios se reivindica en su denuncia y asegura que no es "un problema de Cataluña contra Madrid", sino de la "centralización" de los recursos que se ha dado con el estado de alarma y que afecta también a otras Comunidades Autónomas, aunque "más en Cataluña", matiza.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, negó el pasado jueves las acusaciones del alcalde de Igualada del PDeCat, Marc Castells, de que el Gobierno no enviaba mascarillas y afirmó que dichas acusaciones dañaban la confianza en el sistema sanitario.
También la Comunidad de Madrid o Andalucía han expresado sus quejas con el Ejecutivo central por las demoras en las entregas del material sanitario. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha acusado al Gobierno de retener en aduanas material sanitario adquirido por ella.
Por su parte, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha evitado entrar en discusiones con los gobiernos autonómicos en todas sus comparecencias públicas y se ha limitado a garantizar las buenas “relaciones” y la “coordinación” con los consejeros del ramo. Aunque ha afirmado que no es cierto que el Ejecutivo retiene material para debilitar un gobierno regional del PP.
En este sentido, las palabras del presidente del Colegio de Médicos de Barcelona han servido para apuntalar los argumentos de algunos sectores del nacionalismo que intentan responsabilizar al Estado de la crisis sanitaria en su particular órdago separatista.
Lazo y huelga de hambre
Padrós, que luce un lazo amarillo en su cuenta de Twitter, es el médico que supervisó la huelga de hambre que anunciaron algunos de los dirigentes independentistas condenados por sedición en el Tribunal Supremo cuando todavía se encontraban en prisión provisional.
Como informó EL ESPAÑOL, los presos se alimentaban con batidos nutricionales, aunque él asegura que era solo "suero oral". Al cabo de 20 días, los presos dejaron por voluntad propia la huelga de hambre, pero sin que el Estado ni la justicia hubiera cedido ante ninguno de los argumentos que les llevó a realizarla.
Esta interrupción de la huelga suscitó las sospechas de quienes señalaban que fue una “cortina de humo” para recuperar la atención mediática en el mismo momento en el que bomberos y profesionales catalanes empezaron protestar por los recortes en la región.
Exdiputado de Convergència
La trayectoria de Padrós ha estado también vinculada con la política. El médico fue uno de los fundadores de las juventudes de Convergència Democràtica de Catalunya, el partido de Jordi Pujol, y de 1989 a 1995 fue diputado en el Parlamento catalán.
También ha destacado por ser el impulsor de programas sobre la salud de los médicos y otros profesionales sanitarios a través de la Fundación Galatea, de la que fue su presidente y del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo. Y es miembro fundador de la European Association for Physician Health.
"Representa al colectivo de médicos del centroderecha nacionalista, pero no del actual sector hiperventilado. El último bastión del pujolismo”, explica una fuente de la sanidad catalana a este medio.
De hecho, la ofensiva de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) de presentar candidaturas en todos los colegios profesionales de Cataluña, como ya hizo en el Colegio Oficial de Enfermería de Barcelona, incomoda al entorno de Padrós, pese a ser también un independentista de piedra picada.
"En teoría Padrós es de los suyos, ha participado en varias manifestaciones de la Diada, pero hay cierto malestar porque la ANC va por libre y nunca se sabe”, añade la misma fuente.
Padrós lleva desde 2014 al frente del Colegio de Médicos de Barcelona, uno de los colegios profesionales más potentes de la región. Situado en el barrio de Sarrià, tiene capacidad para sancionar y es un ente de autoridad para toda la red del sistema sanitario catalán.
La candidatura de Padrós resultó ganadora en las dos últimas elecciones, pero el sistema de voto del ente no ha estado exento de polémica. Según explica a EL ESPAÑOL Joan Gené, candidato de COMBtu, candidatura alternativa a la "oficialista" de Padrós, el sistema de votación fue impugnado después ante el TSJC (que todavía no ha resuelto) por presuntas irregularidades. El juez de primera instancia falló en contra del recurso presentado por la oposición.
Antes de la celebración de los comicios, elevaron un contencioso-administrativo por su disconformidad con el sistema de votación, por no ser secreto y restringir el voto electrónico a una bolsa de solo 1.000 votantes (y en el que solo votaron 10 por vía telemática).
En estas elecciones de 2013-2014, la candidatura alternativa COMBtu logró el 42% de los sufragios. En las siguientes elecciones, en 2017, declinaron presentar candidatura por el escenario de intervención de la autonomía tras la aplicación del articulo 155 de la Constitución y la candidatura de Padrós fue la única que concurrió.
Antes de alcanzar las posiciones más relevantes dentro de la gestión de la sanidad catalana, fue el médico de cabecera de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) en la región. Quienes le conocen de esta época destacan que era muy "trabajador".
Sus labores en la radio y televisión pública han precedido a su actual perfil mediático. En plena ola de la crisis sanitaria, sus opiniones en los medios y redes sociales se vinculan inevitablemente con la pugna política de fondo.